Para nadie es un secreto que Colombia es uno de los mayores productores de drogas en el mundo, lo que lo ha hecho centro de múltiples estrategias y campañas para combatir ese eslabón de la difícil cadena del narcotráfico. No obstante, una nueva alarma se ha encendido recientemente por parte de las autoridades sanitarias al determinar la existencia también de algunas situaciones referidas al consumo de drogas, luego de que recientemente se hallaran que algunas de las drogas que circulan en el país, podrían presentar a su vez trazas de un peligroso opioide conocido como fentanilo; que centra la preocupación de países como Estados Unidos.
En ese sentido, los expertos sanitarios recientemente han elevado una alerta para las comunidades que se reconocen como consumidoras de esta clase de sustancias, advirtiendo que si bien la droga en sí ya representa un riesgo para la salud, este se ha incrementado por cuenta de la presencia de este compuesto, razón por la que han pedido ‘no bajar la guardia’.
Según recogen medios internacionales como el diario El País de España, estas alarmas se han encendido en nuestro territorio después de que, en medio de un reciente evento musical organizado a las afueras de la capital de Colombia; el Estéreo Picnic, se adelantara un estudio de las sustancias allí consumidas, encontrando entonces en tal estudio algunas trazas de fentanilo.
Según detalla el diario El País, dicho estudio estuvo a cargo del proyecto Échele Cabeza, y la droga en la que se encontraron los restos referidos es el tusibi (2CB) o tusi, hecho que resultó ser una novedad, pues, en más de una décadas en la que el proyecto se encuentra operando, nunca ha detectado este tipo de sustancias en la droga consumida en esta clase de espacios.
Precisamente, la detección de este opioide se realizó en medio de una acción en la que esta organización pretende generar conciencia sobre los efectos de las sustancias y drogas que se consumen en el país, buscando que exista un consumo consciente, y que las personas que ingieren estos productos puedan discernir si consumen o no, conociendo a su vez las implicaciones de ello.
Si bien se ha conocido que la detección de estas sustancias se logró en un proceso ‘preliminar’, y que serán ahora enviadas las muestras estudios más especializados, la simple identificación del fentanilo, prende ya las alarmas en nuestro país, aunque también se ha advertido que otras sustancias ya habían sido encontradas en drogas similares.
Sobre el particular, directivos del programa ‘Échele cabeza’, han aclarado que es importante tener claro que Colombia no es un país en el que se produzca el fentanilo, ni tampoco un país en el que exista gran consumo de este, salvo en su versión hospitalaria, la cual muchas veces ha permeado el mercado donde algunos consumidores lo han usado como sustituto de otras sustancias como la heroína.
Sin embargo, en aquellas ocasiones, se ha descrito que dicha sustancia se ha presentado en bajas concentraciones, lo que no lo hacía tan riesgoso. Sin embargo, ahora la concentración identificada es mayor, prendiendo las alarmas.
No obstante, el llamado de las autoridades es a comenzar a manejar el tema con la debida responsabilidad, sin que esto eventualmente sugiera el encender mayores advertencias que puedan derivar en el surgimiento de pánico.
En su publicación, el diario El País también ha referido estudios que ya se venían adelantando en el país respecto a la presencia de este compuesto en algunas drogas que se consumen en ciudades como Medellín.
La advertencia también versa sobre la concentración de este opioide, señalando que alcanza a ser hasta 50 veces más potente que la heroína y hasta 100 veces más fuerte que la misma morfina, derivando un gran riesgo referido a casos de sobredosis que en países como Estados Unidos han comenzado a aumentar su proporción mortal.
En ese mismo sentido, según información citada por El País, los CDC en Estados Unidos; Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, han apuntado una cifra mortal cercana a los 109.000 casos por ingesta del fentanilo.
En ese mismo sentido, desde Estados Unidos, en una reciente visita a ese país, el ministro de Justicia de Colombia, Néstor Osuna ha referido que las autoridades de Estados Unidos han referido su temor frente a este compuesto, por lo que han buscado encontrar acuerdos y compromisos con Colombia para la lucha también contra este, pese a que la amenaza que se cierne sobre el país es menor en comparación con la estadounidense, teniendo en cuenta que la historia de consumo de opioides no es tan fuerte en el territorio nacional.
Sin embargo, dentro de la estrategia de combate y control, es necesario, según los expertos citados por El País, que el sistema de Salud de Colombia pueda avanzar en el conocimiento de la sustancia y sus efectos, así como en la adopción de estrategias para contrarrestarlos, en medio de una estrategia antidrogas que vira de la prohibición hacia la prevención y el consumo controlado.