Además de Nini Johana Úsuga, la hermana de Dario Antonio Úsuga alias Otoniel, fueron extraditados media docena de peligrosos delincuentes de las extintas Farc y otras organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico, como el Clan del Golfo.
Se trata de un importante movimiento judicial que confirma la excelente relación que se mantiene con Estados Unidos en materia de cooperación judicial. Las extradiciones ocurren por el delito de conspiración para el tráfico de estupefacientes y los extraditados eran los responsables de estructuras criminales dedicadas al narcotráfico.
Junto a alias La Negra o Nini Johana se montaron al avión delincuentes como alias Don Gustavo y otros que por su recorrido criminal se ganaron un tiquete directo a la justicia norteamericana, donde podrán reconocer responsabilidad e incluso convertirse en colaboradores de las autoridades.
Don Gustavo
Se trata de Luis Eduardo Carvajal, exjefe de la columna Daniel Aldana de las extintas Farc que fue considerado un verdadero capo de las guerrillas en el departamento de Nariño. Incluso se investiga su participación en un engaño al proceso de paz y a la JEP.
Alias Don Gustavo hizo lo posible por incluir en los listados de desmovilizados a peligrosos narcotraficantes y que de esta manera recibieran los beneficios de la justicia transicional. Su trampa se descubrió y nuevos cargos fueron sumados a su prontuario.
“Señalado de hacer parte de una organización que sacaba toneladas de cocaína cada mes a través de las costas de Nariño, el mismo departamento donde ‘Rambo’ fue uno de los principales socios del poderoso Cartel de Sinaloa”, señala un informe de las autoridades.
Alias Chamo
Jaminson Cuero Perlaza, le dicen el Chamo, pero es colombiano. Formó parte de la columna móvil Daniel Aldana de las extintas Farc, entre 2009 y 2015, hasta que el proceso de paz lo hizo alejarse de sus comandantes para convertirse en capo del narcotráfico.
Se sumó a las disidencias de las Farc en el frente 30. Le dejaron la responsabilidad de recolectar y procesar los estupefacientes para esa estructura criminal. Su trayectoria en el narcotráfico arrancó mientras eran un lanchero y rápidamente se convirtió en el coordinador de las rutas de ese negocio.
Su captura y posterior extradición se convierte en un contundente golpe a las redes de narcotraficantes de la zona Pacífica de Colombia, principalmente para el envío de cocaína a Centro y Norte América.
“Se le acusa de supervisar la fabricación y adecuación de semisumergibles que tendrían como fin el transporte de clorhidrato de cocaína hacia Estados Unidos”, dice el informe de la Policía.
El Loco
Alexander Serna Giraldo, alias El Loco, tiene un perfil bastante particular. Fue candidato a la Alcaldía del municipio de Obando, en el Valle del Cauca y se desempeñó como controlador aéreo. Luego se convirtió en un llamado “narco oculto”.
El reporte para su extracción advierte que movió toneladas de cocaína al exterior y que se apoderó del negocio criminal gracias a sus actos de sicariato, de asesinar a sus rivales en el mundo del narcotráfico.
“Esta persona, valiéndose de su condición de piloto y su cargo como inspector aéreo del aeropuerto de Santa Ana de Cartago, tenía la capacidad de enviar a través de avionetas diez toneladas de cocaína al mes con destino a México y Guatemala”, señala el informe.
Alias El Loco es señalado de promover y protagonizar una guerra entre organizaciones criminales en el Valle del Cauca y el Eje Cafetero. Dice el informe que junto a sus familiares conformó un grupo de asesinos que se hicieron llamar los Flacos en Cartago.
El Cura
Juan Diego Restrepo, alias El Cura, era el más antiguo en el negocio del narcotráfico, de acuerdo con el informe de su extradición. Alias El Cura llevaba 20 años al servicio de los carteles del narcotráfico. Conocía de forma detallada el negocio criminal y los capos sabían de su trayectoria en el hampa.
Dice la Policía que alias El Cura pertenecía a un grupo delincuencial dedicado al tráfico de cocaína, cuya zona de injerencia criminal era el departamento de Antioquia y Bolívar. “El centro de operaciones funcionaba en la ciudad de Cartagena, donde empleaban varias bodegas como centros de acopio para el almacenamiento del estupefaciente”, señala el informe.
Su extradición se convierte en una baja considerable para los narcos que tenían en alias El Cura la garantía de rutas para el tráfico de estupefacientes. La información que pueda compartir podría desarticular otras organizaciones criminales.
Sin alias
Franklin Navarro Guzmán no tiene alias, pero sí prontuario criminal. Era, de acuerdo con el reporte de las autoridades, el encargado de reclutar personas para enviar cocaína a Estados Unidos por medio de buques cisterna.
Guzmán formó parte de una poderosa organización criminal que logró meter toneladas de estupefacientes a Centro y Norte América. “Navarro Guzmán era el encargado de reclutar tripulantes para el envío de cocaína y coordinar reuniones entre los pasantes e integrantes de la organización”, advirtió la Policía.