Esos torrenciales chorros de agua que acompañaron las imágenes del embalse de la hidroeléctrica Ituango, empezaron a desaparecer.nEl Fenómeno del Niño azota ya los niveles de agua del embalse, ante la disminución de las lluvias.
Por esa razón, la empresa EPM, que adelanta de la mano de un concesionario la construcción de Hidroituango, tomó una decisión que ocurre por primera vez a cuatro años: cerrar el vertedero, lo que implica que no dejan escapar ni una gota de agua del río Cauca, porque toda se necesita para la producción de la energía.
En esta hidroeléctrica están cifradas -en parte- las esperanzas de abastecimiento de energía en Colombia, en el periodo de fuerte sequía que se avecina y ya empezó con fuerza, como lo evidencia el bajo nivel de lluvias y, por consiguiente, la moderación del contenido de agua en el embalse.
De esa manera, EPM informó a la media noche del 9 de septiembre, que la central Hidroituango realizará el cierre del vertedero, de manera temporal, “porque el caudal que está ingresando al embalse, es justamente el que requieren las unidades 1 y 2 para generar energía y no quedan excedentes de agua para descargar a través del vertedero”. Eso significa, ni más ni menos, que el agua ya está a ras, por lo cual, no la pueden desperdiciar, sino tratar de almacenar toda la que llueva.
Se prevé que cerca de las 8 a.m. del 10 de septiembre se reanude el vertimiento como parte del proceso de operación y mantenimiento de la central.
En Hidroituango se avanza en la tarea de poner todas las piezas para que las unidades de generación de energía 3 y 4 están disponibles para producir a finales de año, según lo ha anunciado EPM.
Hasta el momento, se hablaba de noviembre, como fecha en el cronograma para la entrada en operación de las dos nuevas turbinas, hasta ahora en construcción. Con ellas, además de otras fuentes menores, será que el país podrá enfrentar la sequía del fenómeno climático, sin llegar a tener que apagar la energía.
Sin riesgo para la comunidad
Por ahora, según explicó Julián Ramírez, de la Unidad de Operación Operaciones de la Hidroeléctrica, el cierre anunciado, que incluye los 2 canales de ingreso de agua, “es una maniobra operativa controlada y segura que no representa riesgo para las comunidades aguas abajo y que se podrá presentar de manera continua durante los periodos de bajos caudales en el río Cauca y en la medida que entren en operación las demás unidades de generación”.
La última vez que se había cerrado el vertedero en la hidroeléctrica fue en diciembre de 2018. La medida se adopta cuando el nivel del embalse del proyecto hidroeléctrico Ituango disminuye por debajo de la cota 405 metros sobre el nivel del mar. Técnicamente, si sigue operando si se sigue operando el vertedero en esa cota, el salto del agua sería mínimo, lo que termina afectando las bermas de la infraestructura.
El retrovisor
Hay que recordar que la hidroeléctrica, según estaba previsto inicialmente, debió entrar en operación en 2018. No obstante, un error que luego fue objeto de investigación, ocasionó un derrumbe en uno de los túneles, por lo cuales se desvió el río y las obras se postergaron, al punto de que hasta ahora, aún están en construcción.
La sonada situación ocurrida en Hidroituango puso en peligro a decenas de familias. Inclusive, estuvo en riesgo el muro de la poderosa presa que vierte agua al río cuando los niveles de lluvia son altos.