Un nuevo caso de inseguridad pone en alerta a los habitantes del barrio Rafael Núñez en la localidad bogotana de Teusaquillo, donde varias personas a bordo de un taxi estarían aprovechando para asaltar a los transeúntes.
El hecho fue denunciado por la ciudadana Daniela Robayo a City Noticias, indicando que se encontraba con un amigo en cercanías a su casa esperando un servicio de Uber que habían solicitado, cuando se presentó el asalto.
Explicó que de manera repentina se acercó un taxi que llevaba la placa cubierta y de él descendieron un hombre y una mujer, quienes se abalanzaron sobre ellos para hurtarles sus pertenencias mientras los amenazaban con armas cortopunzantes.
Además, dijo que en medio de esta situación su acompañante reaccionó rompiendo el cristal delantero del automotor, lo cual le causó algunas heridas en el rostro y por eso necesitó atención en un centro hospitalario.
De acuerdo con el relato de la víctima a dicho medio, no es la primera vez que esta banda se valdría de un taxi para pasar desapercibida mientras ejecuta sus fechorías, ya que hace aproximadamente un mes asaltaron a un joven en otra zona del barrio Rafael Núñez.
En la localidad de Teusaquillo se adelantan operativos articulados entre la Secretaría de Seguridad de Bogotá, la Policía Nacional y el Batallón de Policía Militar número 13, con el objetivo de disminuir los índices de inseguridad en sus calles.
Estas acciones comprenden labores de vigilancia en restaurantes, hoteles, discotecas, bares y otros establecimientos comerciales, en los cuales se puedan generar delitos que causan gran impacto en la comunidad, como el homicidio, hurto en todas sus modalidades, tráfico de estupefacientes, lesiones personales o porte ilegal de armas de fuego.
También se adelantan operativos de control en las estaciones del sistema TransMilenio en la avenida Calle 26, la carrera 30 y la avenida Caracas, para desarticular los grupos delincuenciales que se dedican al atraco de pasajeros en su interior.
Los frentes de seguridad buscan además reducir el impacto medioambiental y de inseguridad que generan las personas con residencia no formal, quienes en muchas ocasiones se ubican en improvisados cambuches favoreciendo actos delictivos como el hurto a personas o el consumo de sustancias alucinógenas.
Un suceso similar, el cual lamentablemente hace que la ciudadanía tenga cada vez más desconfianza a la hora de abordar un taxi, ocurrió a mediados de mayo en el barrio Villa Mayor, al sur de Bogotá.
En el relato, la persona afectada, un joven estudiante identificado como Jairo Castro, indicó que al abordar el automóvil en el norte de la ciudad acordó un valor de $30.000 por la carrera hasta su casa.
Para él fue muy extraño que el taxista cambió el precio justamente cuando llegaron a su destino y le exigió $40.000, aunque finalmente accedió para evitar cualquier discusión e inconveniente.
Cuando descendió del carro y estaba junto a la ventana del conductor tomando los datos para hacer una transferencia virtual, el hombre lo golpeó y le arrebató su teléfono celular para darse a la fuga.
La víctima se aferró al automotor para intentar recuperar su equipo, pero el taxista aceleró e incluso intentó deshacerse de él golpeándolo contra las puertas y muros de las otras casas de la zona.
Finalmente, el joven cayó al suelo después de ser arrastrado durante casi una cuadra, aunque por fortuna no sufrió ninguna herida de consideración en este sorpresivo y demencial ataque del conductor.
Afortunadamente, todo quedó registrado en las cámaras de seguridad de esa calle, por lo que las imágenes permitieron identificar claramente este vehículo de placa VEE 530, que pertenece a la empresa RadioTaxi Auto Lagos.