Un sorprendente caso se registró en Soledad, Atlántico, luego de que un bebé de tan solo año y medio se cayera de un séptimo piso, en un momento en el que su madre se encontraba realizando tareas del hogar. Sin embargo, esta escena que pudo terminar trágicamente, es considerado como un milagro tanto por residentes del municipio, como por algunos de los familiares del menor, ya que este continúa con vida y se encuentra con un favorable estado de salud.

Según informaron medios locales, el accidente ocurrió en un conjunto residencial en el barrio El Manantial en la ciudad atlanticense, justamente en la tarde del lunes 14 de febrero.

Relatan que el bebé se acercó al balcón mientras no lo supervisaban y cayó al vacío. Ante la emergencia, fue trasladado al Hospital de la Universidad del Norte, donde le habrían atendido las heridas de gravedad.

El director ejecutivo del hospital, Diego Castresana Díaz, recalcó para Blu Radio que el menor se encontraba estable luego del accidente, aunque su diagnóstico es reservado. “El paciente se encuentra en condición estable, sin embargo, está bajo estricta vigilancia y el pronóstico reservado, ya que las circunstancias descritas en relación con la forma como ocurrió el aparente accidente, así lo justifican. El hospital ha dispuesto todo su equipo profesional y tecnológico para atender todos los requerimientos de este caso”, fueron las palabras de Castresana, poniendo en duda la versión de los familiares del bebé.

Entre tanto, se afirmó que por el momento, las autoridades de Policía de Infancia en conjunto con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), están adelantando las investigaciones pertinentes para determinar cuáles habrían sido las causas del accidenten que pudo haber acabado con la vida de este bebé, o proporcionarle daños irreversibles en su desarrollo.

Este martes 15 de febrero, la abuela del bebé, Josefina Magdalena dio detalles sobre la situación para El Heraldo. En su intervención recalcó que el menor se encuentra en un “excelente” estado de salud, que incluso ya puede caminar, al parecer, el trabajo de los doctores estaría surgiendo efecto en la recuperación.

Respecto a lo sucedido, esta mujer recalcó que el acontecimiento debía ser un milagro, y afirmó que Dios había salvado al bebé de un destino trágico. “El niño se recostó a la rejilla y bueno, pasó lo que pasó, pero Dios metió su mano porque el hecho está, nadie supera eso. El poder de Dios se glorificó de tal manera que la doctora que lo atendió nos dio la información de que el niño está bien, que reconoce a su mamá y que ha interactuado con ella”, explicó la abuela, dando un parte de tranquilidad por el estado del bebé.

Y también agregó que, al suceder el accidente, su hija, la madre del menor accidentado, la había llamado “desesperada” para que fuera a ayudarla con la situación, recalcando que luego de eso, el menor había sido trasladado al centro de salud donde lograron estabilizarlo.

Este no sería el único caso de este tipo, ya que en diciembre de 2021 otro menor cayó de un edificio, esta vez de un quinto piso, en Barranquilla, sin embargo, este no contó con la misma suerte, y tras el impacto falleció por un trauma craneoencefálico severo, a demás de otras heridas que le dejó el accidente en en el cuerpo.