La guerra de poderes en la Corte Suprema de Justicia cayó hace tres semanas en un punto muerto. Cuando se veía más cercana la elección de una tercera magistrada para conformar la Sala de Juzgamiento, que entrará a decidir los procesos penales de los aforados en primera instancia, una tensión interna echó para atrás ese consenso. La votación en favor de la procuradora judicial Myriam Ávila alcanzó 15 de los 16 votos necesarios, sin embargo, de unos días para acá escasamente ronda los 10. Al igual que ella, uno a uno han sido votados los candidados inscritos sin que se llegue a ningún resultado definitivo. No es la primera vez que este alto tribunal se estanca en una elección, sin embargo, esta vez el tire y afloje es sensible porque tienen en sus manos una transformación histórica y llevan cinco meses sin poderle cumplir al país. El 10 de mayo, la rama judicial les envió con un mensaje de urgencia implícito las listas para elegir a tres magistrados de la Sala Especial de Juzgamiento y a seis magistrados de la Sala Especial de Instrucción, selección con la que saldan una deuda con los aforados en Colombia, que consiste en garantizarles el derecho a tener doble instancia en sus procesos judiciales. Aunque a través de un acto legislativo que tuvo bendición presidencial en enero de este año, el Congreso fijó las nuevas reglas no dijo cómo debería hacerse esta transición. Y con cada semana que pasa, la Sala Penal se queda sin oxígeno para seguir funcionando pues los aforados investigados reclaman insistenemente que sus procesos sean llevados por la primera instancia que aunque existe en el papel hasta tanto no se dé la posesión material de los nuevos togados no es más que eso, un instancia virtual. Antes de comenzar el bloqueo, de las listas salieron seleccionados y fueron posesionados dos magistrados de la Sala de Juzgamiento: Ramiro Alonso Marín Vásquez y Ariel Augusto Torres Rojas, quienes ya están en marcha recibiendo los casos de los aforados que están en su última etapa procesal. Uno de estos, es el del exgobernador Luis Alfredo Ramos, pendiente para sentencia. A estas alturas, los aforados alegan que tienen activo su derecho a la doble instancia, y que la Corte Suprema perdió competencia, incluso, para investigarlos. Sin ir muy lejos, este es el argumento principal en un recurso de nulidad interpuesto por la defensa del expresidente Álvaro Uribe Vélez, investigado por supuesta manipulación de testigos, y que la Corte Suprema tendrá que responder en los próximos días. Al indagar por las razones de este frenazo en las elecciones los magistrados se han limitado a decir que se trata de un proceso en el que existen tensiones por las inclinaciones respecto a un candidato u a otro. Sin embargo, fuentes aseguran que es inocultable que los consensos entraron en un punto muerto después del llamado a indagatoria al expresidente Uribe, ya que de allí tendrán que salir los nombres de las personas que entrarán a investigarlo y juzgarlo. En este panorama, la Sala Plena de la corte se reunirá este lunes a votar nuevamente. Por tratarse de temas penales, es tradición en la corte, que quien lleve la delantera en la preselección de las hojas de vida sea la Sala Penal; y esta, a su vez, había llevado un nombre por cada lista que está integrada por una decena de aspirantes. Como esta estrategia no funcionó, se han votado sin éxito uno por uno los 70 nombres que llegaron desde el Consejo Superior de la Judicatura. Este lunes, los magistrados de la Sala Penal tienen previsto para sus compañeros invitarlos a la votación de dos candidatos por lista. SEMANA ha seguido de cerca las votaciones y hasta ahora estos son los nombres de los candidatos que han alcanzado más de tres votos. Sala de JuzgamientoEsta sala está a medio conformar. Fueron elegidos y posesionados los magistrados Ramiro Alonso Marín Vásquez y Ariel Augusto Torres Rojas; un tercer nombre, sin embargo, no ha podido ser elegido. La Corte Suprema de Justicia ha querido que el cierre de esta elección sea con broche de oro poniendo a una mujer, sin embargo, la candidata que fue preseleccionada es la procuradora Myriam Ávila, quien no ha alcanzado los votos suficientes. En esa lista también hay dos nombres de mujeres: la exvicefiscal Elka Venegas Ahumada, quien genera amores y desamores; aunque ha logrado un puñado de votos a un importante sector de la corte genera resistencia por haberse tratado de la mano derecha del exfiscal Eduardo Montealegre. También está la procuradora judicial Martha Gutiérrez Vallejo, quien no ha despegado.Por cuenta del bloqueo, esta tarde los magistrados volverían a votar –con la bendición de la Sala Penal– el nombre de Jorge Emilio Caldas, procurador judicial en varios casos de Odebrecht; es considerado otro de los favoritos en ese proceso, sin embargo, su nombre solo ha sido sometido a votación en una ocasión dada la intención de llenar esta vacante con una mujer. Salas de InstrucciónLos magistrados deben elegir seis magistrados de un total de 60 candidatos. Aunque las listas ya fueron abiertas para votar uno a uno los candidatos, ninguno alcanzó un número representativo. Fuentes de la corte aseguran que ninguno obtuvo un número importante de votos que lo acerque a una elección.Primera lista: La candidata de la Sala Penal es la exmagistrada del Tribunal Superior de Sincelejo Lucy Bejarano. Sin embargo, no cuenta con el respaldo unánime ni siquiera de la Sala Penal, ya que algunos magistrados no ven con buenos ojos que fuera ponente del fallo que archivó en noviembre del 2005 una investigación penal contra el ex jefe paramilitar Salvatore Mancuso por la masacre de Pichilín; años después, este confesó que fue una de las primeras acciones en la que participó materialmente; ocurrió en 1996 y murieron 12 personas. En esta lista, también suena Cristina Eugenia Lombana Velasquez, ex juez penal militar en Popayán; ella fue absuelta por la Corte Suprema de Justicia (con ponencia del magistrado José Luis Barceló) por el delito de peculado en un proceso por la pérdida de un millón de pesos de un caso.Segunda lista: Una de las más opcionadas es Luz Adriana Camargo Garzón, exmagistrada auxiliar que hizo parte del equipo que investigó la parapolítica coordinado por Iván Velásquez, también lo acompañó un tiempo en Guatemala, en la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, y es la candidata de la Sala Penal para quedarse en este cargo. Su nombre ha generado discusiones de un sector de la corte que quiere vetar todos los candidatos que hayan liderado las investigaciones de parapolítica en su momento. Para otro sector de la corte esa experiencia es la mejor garantía. Junto a ella, se disputan el cargo Fabio David Bernal Suárez, magistrado de la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá (ver hoja de vida); y José Enrique Jesús Hernando Caballero Quintero, magistrado de la Sala Penal del Tribunal Superior de Neiva. Tercera lista: Esta es considerada la lista de los magistrados auxiliares. Aunque muchos vienen de hace varios años en la corte, se consideran los candidatos que vienen de las entrañas de la Corte Suprema. Como todos quedaron en un mismo listado, esto obliga a que el alto tribunal elija a solo uno de sus colegas. La vacante será ocupada por uno de estos candidatos: Iván Cortés Peña, magistrado auxiliar asignado a una comisión especial que sigue investigando la parapolítica; Héctor Javier Alarcón Granobles, magistrado auxiliar del despacho de Fernando Castro; Martha Lucía Salgar Rangel, adscrita al despacho de Luis Guillermo Salazar Otero; y Hernando Ardila Barreto, que está en el despacho del magistrado Luis Hernández. Los más opcionados en llegar a obtener la mayoría de 16 votos son Alarcón Granobles y Ardila Barreto. Cuarta lista: Quienes más apoyo han conseguido en esta lista son Luis Jaime Ardila González, magistrado del Tribunal Superior de Bucaramanga, y Jaime Humberto Moreno Acero, magistrado del Tribunal Superior del Valle. Quinta lista: El candidato de la Sala Penal es Marco Antonio Rueda Soto, magistrado de la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá. Con él compite Sandra Patricia Ramírez Montes, fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia. Ambos nombres puntean esa lista. Sexta lista: Los dos candidatos más opcionados de esta lista son James Saez Herrera y Ómar Zarabanda, exfiscal delegado ante la corte hace una década.