Varios cambios en la Policía de Bogotá anunció la alcaldesa Claudia López frente al incremento de inseguridad en la capital en los últimos meses . Entre ellos acabar con los cuadrantes fijos para que sean móviles y retomar la policía comunitaria. Así lo determinó la mandataria tras finalizar el consejo de seguridad con el Gobierno nacional y la Fiscalía ante el preocupante registro de casos de asaltos y hurtos en la capital.
La principal decisión es la adopción de un modelo de vigilancia por cuadrante más flexible, sin fronteras, que pueda perseguir las estructuras delincuenciales. Este reemplazará al esquema de cuadrantes fijos que existe actualmente. “Estamos orgullosos de ser la ciudad piloto de este nuevo modelo de vigilancia (con cuadrantes móviles)”, dijo la alcaldesa, aclarando que también deben atender delitos como la ciberseguridad y la nueva tarea de bioseguridad que demanda un trabajo enorme. Por eso el Distrito focalizó esta medida en 52 barrios de siete localidades: San Cristóbal, Rafael Uribe Uribe, Bosa, Kennedy, Suba, Los Mártires y Ciudad Bolívar. Para la Alcaldía, estas son los sectores de Bogotá que más problemática tienen en cuanto a hurtos y homicidios. De otra parte, el cambio de modelo también contempla que los policías que no estén en pie de fuerza de vigilancia estarán a trabajando como equipo de apoyo en labores de inteligencia e investigación de la delincuencia. Este grupo de policías deberá fortalecer las labores de judicialización de la Fiscalía. Esto, según Claudia López, permitirá “mejor operación en terreno, vigilancia más flexible y capacidad en investigación, que nos lleve a desvertebrar esas bandas criminales”. Un aspecto importante es que volverá la policía comunitaria. Este grupo no estará enfocado en perseguir a los delincuentes sino en garantizar la convivencia entre los ciudadanos para evitar riñas y lesiones personales. Debido a que en esta contingencia la línea 123 se ha focalizado también en atención de salud, la alcaldesa aseguró que esta se reestructurará para convertirla en un 911. "Vamos a prepararnos para que el 123 se convierta en un 911, donde se reciban todas las denuncias y convertirlo en un centro más eficaz, recibiremos denuncias de todo tipo y las investigaremos. Desde allí haremos más control y un trabajo más eficaz en cada caso", explicó Claudia López. La alcaldesa de Bogotá destacó que los últimos hechos ocurridos en la ciudad no afectan los indicadores de delitos de impacto, pero sí la percepción ciudadana. Con corte al 23 de junio, el acumulado de delitos de impacto muestra que el homicidio sigue en los niveles del mismo semestre del año pasado, y el hurto de bicicletas continúa creciendo.
Según cifras de la Alcaldía, en los primeros cinco meses de 2020 se han presentado 33.075 hurtos a personas, 8.150 robos de celulares y 404 homicidios. La mayoría de estos delitos se han reportado en Kennedy, seguida por Engativá y Suba.