En un comunicado la campaña del candidato Rodolfo Hernández señaló que algunos testigos electorales y ciudadanos reportan que la Registraduría Nacional está realizando una prueba piloto sobre los datos biométricos en Santander.

Este proceso, según indica la campaña, ha causado inconvenientes. “Se han presentado algunas irregularidades, porque las personas afirman que el lector de huella NO está funcionando, razón por la cual el proceso electoral se ralentizó, generando largas filas y congestiones en las mesas, poniendo barreras en el ejercicio del derecho constitucional al voto”, se lee en el comunicado.

Por su parte, la Registraduría Nacional le contó a SEMANA que no se está realizando ningún piloto y que la biometría funciona correctamente.

Rodolfo Hernández ejerció su derecho al voto a las 8:00 a. m., acompañado de su familia y su equipo de trabajo, en el colegio Santander, ubicado en el centro de Bucaramanga.

“Invito a todos, especialmente a los santandereanos, a que salgan a votar, que no sea porque algunos santandereanos no quieren votar, o se queden sin votar, perdamos la oportunidad de representar esta tierra, después de más de 100 años, en la Presidencia de la República; todos los santandereanos a votar a conciencia”, agregó el candidato.

Al ser consultado sobre lo que hará durante el resto del día, Hernández indicó que “ahora me voy a mi casa a dormir”, al igual que toda su familia. La campaña del candidato por la Liga de Gobernantes Anticorrupción (Liga) aseguró que “el ingeniero”, como es conocido popularmente, solo se pronunciará sobre las elecciones, cuando se conozcan el 95 % de los resultados.

Programa de gobierno

Una de las definiciones o palabras por las que es más conocido Rodolfo Hernández es por la lucha contra la anticorrupción. Esta idea se reafirma en su plan de gobierno. “Con los corruptos, ¡cero impunidad! Los recursos públicos son sagrados. De la mano de una justicia sólida, efectiva y libre de vicios, tendremos cero tolerancia con quienes promuevan la cultura de la ilegalidad. Lo más importante es saber que todo esto que planteamos se puede hacer con los recursos que dispone la Nación”, detalla el preámbulo, titulado Un nuevo contrato social con Colombia: el camino hacia la paz real.

En su plan de gobierno, el ingeniero Rodolfo Hernández habla de cinco puntos esenciales:

  1. Colombia como un Estado social de derecho.
  1. Una Colombia a la altura del siglo XXI.
  1. Un Estado de iguales ante la ley.
  1. Colombia, un país eficiente y moderno.
  1. Una visión capital del territorio.

Respecto a las propuestas de Hernández relacionadas con la educación, se puede leer en el plan de gobierno que “el más alto presupuesto siempre será dedicado a la educación, por eso, año a año, se garantizará que este sector tenga el mayor porcentaje del Producto Interno Bruto, PIB”. Este documento señala que habrá un recorte a la burocracia, a través del recorte de gastos de funcionarios públicos para ser destinados a la educación.

Algo que causó gran controversia fue su propuesta asociada con el Icetex, pues el candidato sugiere condonar progresivamente las deudas de los estudiantes con esta entidad. El exalcalde de Bucaramanga plantea realizar esto a través de tres filtros que se apllicarían en la primera etapa:

  • Estudiantes activos, con el fin de evitar la deserción.
  • Quienes son parte de los estratos 1 y 2.
  • Quienes obtengan los mejores promedios.

Un factor que complementaría esta política, en caso de que Hernández ganara la carrera presidencial, es otorgar subsidios directos de 20.000 pesos diarios a personas a estudiantes que vivan a más de 50 km.

En el campo de la salud, Hernández propone garantizar que el recurso humano en salud sea suficiente. En su plan de gobierno menciona que su objetivo es acabar con los problemas y obstáculos para acceder a especializaciones médicas. Esto se realizaría “ubicando médicos a partir de un sistema de méritos y generar subsidios de manutención temporal (crear la bolsa de financiamiento por ley estatutaria), para evitar el ingreso de especialistas extranjeros al país que homologan sus títulos sin mayores requisitos”.

Para la vivienda, Hernández hace énfasis en la importancia de acelerar la construcción de viviendas para cerrar el déficit habitacional que hay entre el campo y la ciudad (rural y urbano). El ingeniero, como es conocido popularmente, plantea el diseño de un plan de incentivos para el ahorro e inversión en vivienda. Asimismo, menciona que se debe “ejecutar un programa nacional de vivienda rural que incluye la creación de aldeas rurales integrales, es decir, con servicios habitacionales completos; este programa que debe comenzar por las costas del Pacífico y continuar por la Atlántica, antes de abordar el interior del país”.

Dentro de las propuestas del ingeniero con enfoque de género y en beneficio de la mujer está el desarrollo de estrategias de flexibilización laboral en ámbitos públicos y privados para permitir mejores condiciones para el trabajo de la mujer cabeza de hogar. “Se desarrollará un programa novedoso en el que el Estado, junto a las empresas del sector privado, construya espacios para el cuidado de los hijos de las trabajadoras”, señala Hernández en su programa de gobierno.

Para los jóvenes, el candidato por la Liga de Gobernantes Anticorrupción, propone el reconocimiento de la juventud colombiana como una población protagonista en el mundo de la política colombiana, especialmente en las decisiones de políticas públicas. Según se lee en este documento de propuestas, Hernández busca “mantener abierta una mesa de diálogo permanente entre el gobierno nacional y las organizaciones sociales de juventudes”.

La “Ciudad resocializadora” es una de las propuestas del ingeniero en caso de que quede electo como presidente de Colombia. Este es un programa que tiene como propósito transformar el concepto de las cárceles, a través del desarrollo de un proceso de optimización de recursos y resocialización de los penados. Este candidato destaca algo relacionado con uno de los temas principales en su discurso (cero impunidad con los corruptos) y es que no habrá un trato preferencial con los penados, especialmente si la persona es corrupta.