Campesinos de Santander, Norte de Santander, Boyacá, Antioquia y Manizales se dieron lugar en diferentes vías de estos departamentos para generar bloqueos como respuesta a la intención del Gobierno de Gustavo Petro de crear zonas de reserva natural en los páramos de estas regiones.
Los afectados aseguran que esta acción no les permitiría trabajar la tierra a la que por años se han dedicado, por lo que decidieron salir a las vías, situación que también sucedió hace algunos años, cuando las protestas duraron cerca de 19 días.
Por el momento, se han registrado bloqueos en la vía entre Paipa y Tunja, también en el sector Higueras, en el mismo departamento. Así mismo, en el sector de Curos, en la vía que conecta a Bogotá con Bucaramanga, la carretera se encuentra totalmente bloqueada, por lo que cientos de viajeros están en medio de la vía esperando a que se levanten las manifestaciones.
Los bloqueos también se han presentado en los sectores de Berlín y Picacho, en Santander; de igual forma, en la vía que comunica a Cúcuta con Pamplona, otros 200 campesinos han salido a las carreteras, generando afectación en ese tramo.
Según Edwin Alberto Blanco Portilla, presidente de Asojuntas en el municipio de Supatá y representante de la Secretaría Ejecutiva Ambiental de la Federación de Juntas de Acción Comunal de Santander, apoyan esta movilización y rechazan la iniciativa que afectaría actividades económicas como la ganadería, la minería y la agricultura.
“Nos unimos al paro campesino, nos unimos al paro de los paramunos, nos unimos al paro minero”, dijo Blanco.
“No queremos áreas de reservas temporales mediante el decreto 044, queremos garantías para nuestros campesinos. Decirle sí a la ganadería, decirle sí a la agricultura, decirles sí al turismo, decirle sí a la minería, por eso hay que defender todas las actividades económicas que están en nuestra región. Podemos vivir con nuestra biodiversidad y estar en paz y en tranquilidad sacando adelante nuestras actividades económicas”, dijo Blanco en un video publicado en redes sociales.
Entre tanto, campesinos del Bolívar y Córdoba también se sumaron a las protestas al rechazar la orden de destrucción de maquinaria amarilla por parte de las fuerzas militares, y las medidas ambientales que estarían afectando sus actividades económicas enfocadas en la extracción minera.
“Consideramos que, objetivamente, existen condiciones para realizar el paro nacional (…). La criminalización de la actividad y (se) desconoce que la minería en general, no solo del oro, contribuye a construir las herramientas y equipos para frenar el cambio climático y la conversión a energías nuevas y sostenibles”, dijo Conalminercol.
Dentro de sus acciones, los campesinos, ganaderos y mineros le han enviado un amplio pliego de peticiones al Gobierno nacional; sin embargo, aseguran que no han encontrado voluntad política por parte del presidente Gustavo Petro.
“Suspender la quema y destrucción de maquinaria en minería a través de los operativos realizados por la fuerza pública en contra de las comunidades mineras, pequeños y medianos mineros”, indicaron.
Se calcula que a las manifestaciones y bloqueos que se planean en el bajo cauca antioqueño acudan, por lo menos, 30.000 campesinos y mineros de la región, razón por la que las autoridades han tomado medidas como decretar la prohibición a la venta de bebidas alcohólicas en la zona, con el fin de evitar altercados por personas alicoradas.
“Se prohíbe la venta de licor hasta nueva orden, se restringe el transporte de mudanzas, se suspenden los permisos para porte de armas de fuego y se impide la comercialización de cualquier elemento pirotécnico en el pueblo”, señaló el documento emitido por la Alcaldía del municipio de Caucasia.