Ante el caos que se ha presentado por la expedición del pasaporte en varias regiones del país, la Cancillería anunció nuevas medidas para evacuar las solicitudes que tiene represadas de los últimos meses como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
En ese orden de ideas, el Gobierno nacional emitió una resolución con la cual suspende de manera provisional el trámite de renovación de pasaportes para menores de edad y hasta el término de un año la obligatoriedad de cambio de pasaporte cuando esa población cumple siete años.
“La vicepresidente y ministra de Relaciones Exteriores, Marta Lucía Ramírez, firmó la Resolución 7421 que suspende de forma provisional y hasta el término de un año, la obligatoriedad de cambio de pasaporte cuando el menor de edad cumple siete años o alcanza la mayoría de edad, establecida en el literal h del artículo 15 de la Resolución 6888 de 2021. Destacando que esta decisión se toma para facilidad de los menores de edad y sus padres”, explicó la Cancillería por medio de un comunicado.
El Gobierno nacional, explicó que el requisito se suspende porque “es un hecho público y notorio que la demanda actual de pasaportes se ha incrementado, más que proporcionalmente, por lo cual resulta necesario disponer de una solución inmediata que permita a los ciudadanos colombianos facilitar su movilidad”.
A renglón seguido, el Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que la entidad ha duplicado su capacidad de expedición de pasaportes de 64.000 a 140.000 pasaportes mensuales. Sumado a ello, hizo un nuevo llamado a las personas que solicitan diariamente su cita de pasaportes para que una vez tengan la hora de atención, asistan oportunamente a sacar el documento y así no se pierda el turno de atención.
Caos
Hace varios días, SEMANA se trasladó a la calle 53 n.° 10-60, en la localidad de Chapinero, occidente de Bogotá, un lugar que se convirtió en una zona de alta congestión, todo por los cientos de ciudadanos que buscaban sacar su pasaporte atendiendo al llamado del pasado 26 de noviembre que hizo la vicepresidente y canciller, Marta Lucía Ramírez, para la expedición del documento para viajar como plan piloto.
En esa ocasión, poco orden se vio con el primer plan piloto. Las aceras de la calle 53 y las calles por donde transitan los vehículos son un verdadero caos. La gente llegó incluso con dos o tres días de anticipación, equipados de cobijas, carpas, sombrillas, sillas, termo de tintos y muchas madres con sus pequeños hijos. El clima fue su mayor enemigo, generalmente el calor fue esos días insoportable en las mañanas y para los que en la tarde no lograron cumplir su objetivo, la lluvia los obligó a buscar refugio, causando mayor aglomeración.
En ese sentido, SEMANA recorrió el lugar y se encontró casos como el de Marcela, una ciudadana que llegó desde Medellín, gastó 12 horas viajando confiada en lo que según ella encontró en la página: “No decía nada de pico y cédula, ahora me va a tocar devolverme porque tengo a mi hijo en casa solo. Nos dijeron que la solución está en la web, pero es falso, está caída”, denunció a este medio mientras cargaba su maleta.
“Mucha desorganización porque hay gente que se queda desde el día anterior, pero a $ 200.000 venden los puestos, mucho colado. Solo dan 1.200 fichas, entonces toca madrugar”, afirmó en ese momento.