Un año les tomó a los investigadores de la Dijín de la Policía tener plenamente identificados los movimientos del presunto comandante del frente 30 de las FARC, Martín Leonel Pérez Castro, capturado en una lujosa finca en Alcalá (Valle del Cauca). Alias ‘Richard’ es considerado el ‘capo’ de esa guerrilla, por ser la persona que al parecer producía grandes sumas de dinero para la compra de armas y el sostenimiento de la organización ilegal. El presunto guerrillero, al igual que ha sucedido en otros casos con miembros de grupos ilegales, fue capturado luego de que le rastrearon una llamada. El querer estar cerca de su familia fue otra de las debilidades que lo hicieron caer, pues en el momento de ser detenido estaba junto con su esposa y sus cuatro hijos. Alias ‘Richard’ tiene un prontuario delictivo muy amplio en los 22 años que duró en la guerrilla. Es sindicado de secuestros y extorsiones, modalidades delincuenciales que al parecer utilizaba para conseguir dinero y así no sólo financiar a las FARC, sino darse el lujo de tener extensas propiedades y ganado en diferentes regiones del país. La importancia de Pérez radica en que sería el comandante guerrillero que más aportaba recursos ilegales al secretariado de las FARC y al bloque occidental 'Alfonso Cano', producto del tráfico de cocaína y de marihuana en el suroccidente del país. Labores de inteligencia de los miembros de la Policía lograron establecer que el capturado había salido de su campamento en el Pacífico caucano, para reunirse con sus familiares. Hasta el sitio de encuentro llegó el operativo que condujo a su captura y a la de cuatro de sus hombres. La sola propiedad donde se escondía ‘Richard’ está avaluada en 2.600 millones de pesos. En su poder también tenía 1.600 millones de pesos, al parecer producto de producción y envío de droga desde el Valle del Cuaca y Cauca hacia el Pacífico, donde coordinaba su salida rumbo a Centroamérica, México y Estados Unidos. En la propiedad también había 60 cabezas de ganado, dos lujosas camionetas, cuatrimotos y ocho celulares. Según la Policía, era tal la confianza que el secretariado de las FARC le tenía a ‘Richard’, que era él quien manejaba por lo menos el 60 % de los dineros producto del narcotráfico. También tenía la labor de comprar armas tales como ametralladoras, fusiles, lanzamisiles tierra-aire, entre otros elementos con los que surtía diferentes frentes guerrilleros. Llegó a ser cabecilla del frente 30 luego de la muerte en combates de Jorge Neftalí Umenza Velasco, alias ‘Mincho’, en el 2011. Las autoridades lo buscaban para hacer efectivas 28 órdenes de captura por los delitos de homicidio agravado, secuestro y porte ilegal de armas de fuego. Además cuenta con una condena de 30 años de cárcel. Pero no sólo le debe a la justicia colombiana: se espera que Estados Unidos los pida en extradición por el envío de droga a ese país. Alias ‘Richard’ sería el responsable de siete emboscadas a la Policía y de quema de vehículos de carga en el Valle. Además habría planeado y ejecutado el secuestro de los diputados de Valle del Cauca en el 2002. También ese señalado como el responsable de las tomas guerrilleras a las bases militares en Dagua y Trujillo (Valle del Cauca), y Salvajina en Suárez (Cauca).