Poco después de las seis de la tarde de este martes investigadores de la Sijín de la Policía Metropolitana de Bogotá arrestaron a los dos responsables de un robo que 24 horas antes se convirtió en tendencia en redes sociales.En la noche del pasado lunes 29 de enero dos hombres en motocicleta llegaron hasta un conocido local de hamburguesas ubicado en la exclusiva zona G al norte de la capital. Los delincuentes previamente habían identificado a dos clientes que portaban dos lujosos relojes. Cuando los vieron entrar al sitio de comida rápida ingresaron y con armas en mano los despojaron de los relojes y una cadena que tenía una de las víctimas. El caso rápidamente se tomó las redes sociales e incluso varios medios le dieron amplio despliegue al hecho.Puede leer: La banda de los RolexEn menos de 24 horas los investigadores de la Sijín resolvieron el caso y detuvieron a los delincuentes. En un hotel en el barrio Restrepo, al sur de la ciudad, los uniformados allanaron la habitación 413. Previamente habían llevado la información a la Fiscalía que autorizó el procedimiento.Drogados y borrachos estaban en el lugar dos hombres, quienes aún celebraban el robo cometido la noche anterior. Los delincuentes quedaron desconcertados por la rápida reacción de la policía. En el cuarto tenían aún los dos relojes robados, la cadena y un tercer reloj así como dinero en efectivo. No habían alcanzado a vender los joyas valoradas en más de 40 millones de pesos.A pesar del asalto y el escándalo mediático que generó la reacción de los investigadores no fue producto del azar. Desde el año pasado ya la Sijin venía y había detenido a otros integrantes de esa banda conocida como los Rolex.Le puede interesar: Cayó la banda de los RolexDe hecho en mayo del año pasado SEMANA había revelado en exclusiva la forma de actuar de esa banda, entre cuyas víctimas estuvo el exarquero de la Selección Colombia, Farid Mondragón. En ese momento se describió su modus operandi.La banda de atracadores actuaba de forma violenta y coordinada. Su objetivo era uno solo: costosos relojes. Su lugar de ‘operaciones‘ está localizado es un sector específico del norte de Bogotá que va desde la calle 69 hasta la 93 entre carreras 5 y la Caracas. En estos lugares están algunos de los barrios y sitios más exclusivos y concurridos de la capital, como las conocidas zona G, T y el parque de la 93, entre otros.El 20 de abril de 2017, Mondragón fue víctima cuando a plena luz del día, el jugador estaba cerca a las inmediaciones del Centro Andino en un almacén de ropa. Un hombre con pistola en mano entró y tras apuntarle le exigió que le entregara el costoso reloj que el exguardameta portaba. Tras despojarlo, el ladrón salió y abordó una moto que lo esperaba y escapó escoltado por otras dos motos en las que iban cuatro cómplices. Mondragón fue la víctima más visible de esta banda. Pero no fue el único.Un mes antes al menos cuatro hombres más fueron víctimas de esa banda especializada en robar relojes de alto costo. Hace varias semanas en la carrera novena con calle 78, cerca al Gimnasio Moderno, un comerciante que caminaba por la acera fue cercado por dos motos en las que iban cuatro hombres. Dos de ellos descendieron y tras encañonarlo lo despojaron de su Rolex avaluado en 15.000 dólares. A pocas cuadras, un grupo de escoltas presenció la escena y se desató una balacera entre ellos y los asaltantes. Nadie resultó herido.La última víctima conocida de esta banda se conoció en mayo de 2017. Se trataba de un ejecutivo que viajaba en su camioneta con su conductor rumbo a su casa. Estaba siendo seguido por un carro y una moto. Lo cerraron. Lo encañonaron y en menos de un minuto le robaron el reloj, que costaba más de 10.000 dólares.No era una banda de atracadores cualquiera. Su modus operandi comienza por una especie de labor de inteligencia sobre sus víctimas. Los delincuentes acudían a los restaurantes, a las áreas comunes de los centros comerciales o sobre la vía pública. Allí analizan qué tipo de reloj llevan las personas y de esa forma establecen su blanco. Una vez el ‘marcador‘, que es como se conoce a quien hace esa labor, determina quién porta ese reloj, le avisa a sus secuaces que discretamente comienzan a seguir al incauto. Lo persiguen hasta cuando ven el momento oportuno para lanzarse como una jauría y atacarlo.Otro de los métodos usados consistía en que en algunas de esas zonas hay vendedores callejeros que ofrecen relojes en las esquinas. Ellos buscaban a una persona, le mostraban su mercancía y le pedían a la víctima que les dejara ver qué tipo de reloj utilizaba. Ingenuamente muchos caían en la trampa sin saber que esa era la primera fase de un atraco.Aunque varias de las víctimas usaban Rolex, esta no es la única marca de relojes que busca la banda. Otras similares y costosas están en las listas. Estas joyas que en promedio pueden rondar los 15.000 dólares son vendidas por la banda en el centro de la ciudad y allí son comercializados en establecimientos en donde son revendidos por entre 1 o 3 millones de pesos.Tras esos hechos del año pasado varios de los integrantes de esa banda fueron arrestados. Con las detenciones de hace pocas horas de estos dos delincuentes que cometieron el robo de ayer queda desarticulada esa organización.