Luego del nuevo hallazgo de una cabeza humana en zona urbana de Tuluá, centro del Valle, las autoridades de ese municipio confirmaron este jueves la captura de 31 personas de la banda delincuencial ‘La Inmaculada’, quienes serían los responsables de estos terribles asesinatos.
La noticia fue confirmada por el ministro de Defensa, Diego Molano, quien anunció un aumento en el pie de fuerza de este municipio, donde en lo corrido de 2021 se han presentado tres casos de decapitados y el arrojo de cabezas humanas en sectores poblados como un acto de amedrentamiento.
“Fueron 31 capturas por orden judicial, 10 imputaciones y 33 allanamientos. Esto significa que con la captura de esta organización criminal, se evita la comisión de que estos delitos persistan. Tenían amedrentada y atemorizada a la comunidad y cometieron todo tipo de vejámenes”, dijo el ministro de Defensa.
El alto funcionario precisó que con estas capturas “se esclarecen seis de los homicidios presentados este año en Tuluá, el hecho de un ciudadano decapitado en el mes de enero, otro ciudadano desmembrado en mayo y el homicidio de un guardián del Inpec”.
Molano también advirtió que para dar con la captura de cabecillas de la disidencia Adán Izquierdo, así como el ELN, se elevó la bolsa de recompensas. “Por alias ‘Óscar’ o alias ‘Hugo’, cabecillas de la Adán Izquierdo, hasta $300 millones de pesos. Por alias ‘Camboya’ o alias ‘JJ’, de la Jaime Martínez, hasta $80 millones de pesos, y por alias ‘Yadira’ o ‘Yesenia’ del frente Ernesto Che Guevara del ELN hasta $50 millones”, puntualizó el ministro.
Adán Izquierdo, temible estructura criminal
Los picos de violencia en el centro y norte del Valle del Cauca no llegaban a niveles tan preocupantes desde aquellos días en que esta región era escenario de disputas a sangre y fuego entre carteles de narcotraficantes. Hoy, la realidad parece retornar a esos tiempos oscuros y deja en el aire la sensación de que la muerte se pasea campante y atemorizante por los lugares que se habían constituido como remansos de paz desde hace varios años.
La razón: el Valle del Cauca asiste al crecimiento de una estructura criminal. Se trata de la columna móvil disidente Adán Izquierdo, que en su mayoría está conformada por excombatientes de las FARC que nunca se acogieron al Acuerdo de Paz. Este grupo forma parte del Comando Organizador de Occidente, la agrupación criminal que tiene como cabezas visibles a ‘Iván Mordisco’ y ‘Gentil Duarte’, ambos escondidos en lo más profundo de las selvas del sur del país.
El Comando Organizador de Occidente tiene ocho columnas móviles y cuatro frentes. Todos disidentes de las FARC. Esas filiales criminales ya tienen el poder mafioso en Caquetá, Putumayo, sur y norte del Cauca, así como parte de Nariño.