Desde hace algún tiempo, las cosas se han estado ‘calentando’ en el Bajo Cauca antioqueño. El síntoma más claro de este aumento de la violencia fue la masacre de 5 personas que ocurrió en el municipio de Caucasia hace cerca de mes y medio y que pasó desapercibida. Lo que revelaron las investigaciones posteriores fue que al parecer se trataba de 5 hombres delegados por una organización delincuencial de Medellín para copar espacios de venta de droga en la región. En aras de realizar sus labores de inteligencia, los hombres habrían contactado a un sujeto conocido bajo el mote de Bebé, quien los esperó en la terminal de transportes y los escoltó en taxi desde la salida del autobús hasta el lugar en el que fueron asesinados.Puedes leer: Terror en el Bajo CaucaLo que no sabían los invasores es que alias Bebé, -presunto autor intelectual del homicidio- era en realidad uno de los cabecillas de la subestructura Virgilio Peralta Arenas, afiliada al Clan del Golfo. Sobre su cabeza y la de sus compañeros Escalera, Rubén, Andrea y Juan Campanero pesaba una circular azul de Interpol, lo cual los transformó en objetivos prioritarios de la fuerza pública en la región e hizo que fueran unos de los primeros capturados dentro del megaoperativo que tuvo lugar esta semana en el Bajo Cauca y que condujo la policía de Antioquia.Tan sólo en Tarazá y Caucasia fueron aprehendidas 30 personas, entre las que se contó un concejal de Tarazá, así como una enfermera y un encargado de recursos humanos del hospital local. De acuerdo con lo que pudieron establecer los investigadores, el concejal habría sido parte del componente político del grupo delincuencial y era el encargado de vigilar a los contratos que celebrara la administración, para estar seguro de que el tentáculo del Clan del Golfo obtuviera su tajada de cada uno de ellos a través de la extorsión.Te puede interesar: De pequeños narcos de pueblo a sucursales del Clan del GolfoEn cuanto a la enfermera, que se había desmovilizado del Bloque Mineros unos años antes, tenía la tarea de curar a los cabecillas de mayor rango de la subestructura que fueran heridos en combate. Mientras que el trabajador de recursos humanos transportaba en ambulancia a los lesionados y evitaba que el hospital reportara a los heridos por bala que se presentaran en su sede. Además de que al parecer recogía los medicamentos necesarios para el frente Virgilio Peralta y se encargaba de corromper a uniformados de la fuerza pública local. Durante la operación que fue planeada a lo largo de todo el año, los agentes de la agencia Seccional de Investigación Criminal, de Inteligencia y del Grupo de Operaciones Especiales capturaron a un total de 67 personas en menos de 24 horas, entre las cuales 16 personas cayeron en Yarumal y 21 en Guarne, también presuntamente pertenecientes a clanes afiliados al grupo del Clan del Golfo, antiguamente conocido como los Urabeños.Sugerimos: Alias Inglaterra, el otro capo caídoAdemás de dedicarse al tráfico de estupefacientes, los integrantes de las bandas “De Muelas” y “Los Cachorros” son señalados de haber participado en decenas de homicidios, extorsiones y desplazamientos, así como de la utilización de artefactos explosivos como el que lesionó a dos policías y dos civiles en mayo pasado en el municipio de Cáceres. Motivo por el cual serán imputados por los delitos de delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego, tráfico, fabricación y porte de estupefacientes y concierto para delinquir agravado, entre otros.