La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y la Alcaldía de Medellín informaron este martes 21 de diciembre que dos presuntos ladrones del millonario y cinematográfico robo en una bodega de oro en Medellín, cometido a comienzos de noviembre, fueron capturados e identificados como alias Búcaros y alias Pan y Agua.

El primero de ellos fue detenido en la Comuna 6 de la capital de Antioquia, mientras que el segundo fue capturado en la ciudad de Barrancabermeja, Santander. En total, son 20 las personas que actualmente están vinculadas a la investigación por el robo y nueve ya han sido privadas de la libertad por su participación en los hechos.

“Con Operación Cazador realizamos dura ofensiva contra el hurto en Medellín: capturamos a 14 delincuentes por hurtar a personas y comercios. Dos de ellos participaron en el hecho presentado en la comercializadora de oro de Las Vegas y uno en un sonado robo en restaurante en Manila”, agregó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, en su cuenta de Twitter.

Los dos presuntos ladrones del robo en la bodega de oro ahora deberán responder ante la justicia por cargos como hurto calificado y agravado. En varios videos quedaron grabados los momentos en los que aproximadamente 20 hombres fuertemente armados trataron de cometer el millonario hurto en la capital antioqueña.

Aunque la reacción de la Policía obligó a los asaltantes a huir del lugar, el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, confirmó que sí hubo robo de una gran suma de dinero. Según dijo el jefe del ente acusador, en el asalto a la comercializadora de oro, quienes escaparon se llevaron consigo material aurífero, cuyo costo es de 500 millones de pesos y su monto puede llegar a los 1.800 millones de pesos luego de ser trabajado.

“Fue hurtado material aurífero por una cuantía de 500 millones de pesos. A los procesados se les imputará cargos por delitos de hurto calificado y agravado, porte civil de armas de uso civil y militar y utilización ilegal de uniformes”, aseguró en noviembre el fiscal general de la Nación.

Entre tanto, el pasado 12 de noviembre, por falta de pruebas, quedaron en libertad tres personas que estaban vinculadas en el millonario robo a una fundidora de oro en Medellín. Al parecer, aunque estos hombres estaban en las instalaciones de la misma bodega de servicios de encomienda realizando actividades diferentes, no tendrían nada que ver con el robo, pues las autoridades no establecieron evidencia en su contra.

“Las evidencias, por el momento, infieren que los ciudadanos no tienen nada que ver”, explicó la jueza en medio de la audiencia. Se aclaró que aunque libres, estas personas no quedan exentas, sino que continuarían dentro de la investigación y relacionadas con el caso.

La Fiscalía General anunció su descontento con la libertad de los tres implicados y confirmó que apelará a la decisión de la funcionaria. Aunque en la audiencia también se demostró que la vestimenta que estas personas estaban usando el día del robo no coincidía con las que vestían los otros participantes.

Stiven Alexánder Grillo Ferrucho, Floy Joarson Púas y José Alejandro Montealegre Mejía fueron los hombres que quedaron en libertad y, de acuerdo con el sitio en internet Pulzo, los días que estuvieron en la cárcel fueron de tortura.

“Pasaron dos días sin darnos comida. Nuestros amigos y familiares nos llevaban los alimentos, pero nunca nos entregaron nada. Estuvimos en un calabozo como si fuéramos los peores delincuentes y fuimos humillados. Eso es lo peor que le puede pasar a alguien”, dijo Floy Joarson Púas.

Por su parte, Montealegre expresó: “Nos hicieron pasar días de tortura porque estábamos amarrados como un perro los primeros días. Nos esposaron a una reja y nos tocó dormir parados. Fue algo muy duro. Esto te daña. Somos inocentes, la gente nos insultaba y nos gritaba ‘ladrones’”.