Un sargento viceprimero del Ejército Nacional identificado como Jorge Castañeda y Ubeimar Bautista Sánchez, alias Cháchalo, fueron capturados como presuntos integrantes del aparato armado y logístico de la organización criminal Los Contadores, que opera en Nariño.

De acuerdo con la información de la Fiscalía General de la Nación, el sargento Cárdenas, supuestamente, aprovechaba el cargo y mando para brindar información reservada a los jefes de Los Contadores sobre operativos y acciones militares en su área de injerencia.

Asimismo, es señalado de estar vinculado directamente en el tráfico de estupefacientes y de armas, permitiendo su libre movilidad, además de facilitar el tránsito de los integrantes del grupo ilegal.

Entre tanto, alias Cháchalo que perteneció al bloque oriental de las extintas Farc, no se sometió al proceso de reincorporación y se habría vinculado a la estructura ilegal.

El ente acusador señaló que, actualmente, sería el cabecilla de la red de sicarios y tendría a su cargo una amplia zona en frontera con Ecuador, y en las veredas La Vega, Imbili, Tangareal, El Pital, Caunapi, Cajapi, La Bocatoma, La Peña, Peña Colorada, Candelillas, Bucheli, San Jorge y El Carmen, en Tumaco (Nariño).

En octubre de 2021, alias Cháchalo habría ordenado ejecutar dos homicidios en Tumaco, los cuales tendrían relación con disputas con distintas estructuras por el control de las rutas de narcotráfico y otras economías ilícitas.

La Fiscalía imputó a Cháchalo los delitos de: homicidio agravado, concierto para delinquir agravado; tráfico, fabricación y porte de estupefacientes, y fabricación, tráfico, porte de armas de uso restringido, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.

Entre tanto, el militar fue imputado por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.

Durante la audiencia ante un juez de control de garantías, los cargos no fueron aceptados por los procesados, por lo que deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario.

Estas personas fueron capturadas en una acción conjunta de la Fiscalía, a través del CTI, y el Ejército Nacional en Tumaco (Nariño).

Cae el denominado gurú de la fabricación y tráfico de armas

De otra parte, la Fiscalía informó este domingo que fue capturado quien sería uno de los mayores fabricantes y traficantes de armas de fuego para las organizaciones criminales.

Se trata de Carlos Alberto Zuluaga Arroyave, quien habría completado casi 15 años en la obtención, ensamblaje y venta de armas. Los elementos de prueba indican que, supuestamente, conseguía fusiles, ametralladoras, lanzagranadas, entre otros elementos, que eran extraídos de sedes militares en Cundinamarca, Tolima y Meta, así como en el mercado clandestino.

En el inmueble que tenía como fachada un establecimiento comercial de arreglo florales; sin embargo, se encontró el taller para el ensamblaje de las armas y algunas piezas para fusil. | Foto: Fiscalía General de la Nación

De acuerdo con el ente acusador, al parecer, preparaba las armas en un taller artesanal que tenía en su lugar de residencia y, posteriormente, las comercializaba a las estructuras del Clan del Golfo en Antioquia y Córdoba, a las disidencias de las Farc en Meta, Caquetá y Cauca, y al ELN en el suroccidente del país.

Llamó la atención en la investigación que Zuluaga Arroyave, presuntamente, vendía de manera paralela armas a los grupos disidentes y al Eln en Cauca, para que se enfrentaran entre sí por la disputa de las rutas del narcotráfico.

El denominado ‘gurú de las armas’, como sería conocido por la criminalidad, fue capturado junto a su esposa, Rosa Helena Maya Ramírez, en el barrio Normandía, en el occidente de Bogotá.

El inmueble tenía como fachada un establecimiento comercial de arreglo florales; sin embargo, en el lugar se encontraron el taller para el ensamblaje de las armas y algunas piezas para fusil.

Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales imputó a la pareja delitos como: concierto para delinquir; fabricación, tráfico y porte de armas; municiones de uso restringido y privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos, así como enriquecimiento ilícito de particulares.

Los procesados deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario.

Carlos Alberto Zuluaga Arroyave había sido objeto de dos diligencias de registro y allanamiento en Bogotá, en julio de 2020.

En uno de los procedimientos, en un local comercial de un San Andresito del centro de la ciudad, se incautaron cuatro fusiles, tres lanzagranadas, 700 partes de ametralladoras, munición y 34.000.000 de pesos en efectivo; en el otro, realizado en el barrio Toberín, también se encontraron fusiles y 28.200.000 de pesos.