No cesan las reacciones tras la polémica propuesta del senador de la Colombia Humana y precandidato a la Presidencia, Gustavo Petro, de suspender la exploración petrolera si llega a la Casa de Nariño.
El senador de izquierda aseguró que esta será su primera decisión una vez llegue a dirigir el país.
El candidato añadió que, una vez suspendida la exploración de petróleo, el país debería dejar de exportar el crudo para usar las reservas en la demanda interna. “Cuando cesa la exploración de petróleo tenemos doce años de reserva. Si dejamos de exportar, tenemos doce años en los que las reservas van a sostener la demanda interna de petróleo”, dijo Petro.
Ante esta propuesta, el exnegociador del Gobierno en La Habana, Humberto de la Calle, hizo un reposado análisis en el que le responde a Petro que suspender la exploración de un tajo es una propuesta que “carece de viabilidad”.
De la Calle reconoció que si bien se deben suprimir los combustibles fósiles y, también, poco a poco la exploración, esta tarea exige un tratado en el que los países desarrollados cooperen con las naciones en desarrollo para conseguir una “equidad para la transición”.
“Es dable saludar las preocupaciones recientes de Gustavo Petro, candidato a la Presidencia de la República. Pero la simple formulación de la suspensión inmediata de la exploración con el inicio del periodo presidencial, sin examinar las complejidades que se derivan de este anuncio, no pasa de ser un postulado carente de viabilidad”, apuntó De la Calle en un documento que reveló en redes sociales.
Para De la Calle, deben examinarse varios ángulos: la aplicación en el tiempo de una política de disminución de la exploración, en función de variables que van desde la cuestión fiscal; las proyecciones de energía fósil, pero también de energía limpia de reemplazo; la marcha de la economía, el crecimiento de actividades menos demandantes y la situación de la producción mundial.
“En pocas palabras, se requiere un plan para la transición energética que no pasa por el simple gesto de cerrar toda la exploración de un día para otro”, manifestó el también exministro de Gobierno.
De la Calle agregó que “todas esas complejidades” llevan a la necesidad de diseñar un “tratado de no proliferación del uso de combustibles fósiles”.
Rechazo en gremio de hidrocarburos
La propuesta de Petro también generó rechazo en la Asociación Colombiana de Petróleo.
“Suspender la exploración es condenar al país a declinar su producción de petróleo y gas hasta perder la autosuficiencia, y tener que importar petróleo para cargar las refinerías y gas para abastecer el consumo”, aseguró Francisco Lloreda, presidente de esta asociación.
Lloreda agregó que esto sería “condenar a los colombianos a pagar combustibles líquidos (gasolinas y diésel) más costosos”.
“Condenar a once millones de hogares en Colombia a pagar un gas natural más costoso y a las industrias que utilizan el gas como fuente de energía”, apuntó el líder de esta asociación.
Además, esto implicaría, según Lloreda, condenar al país a pagar una electricidad más costosa y con riesgo de no prestar el servicio en horas pico y de apagones, pues el respaldo del sistema eléctrico del país es el gas natural; más de 25 % de la electricidad es de gas natural”.