Cada día que pasa las autoridades comprueban que el Cartel de Sinaloa de México y la banda criminal Clan Úsuga operan cada vez más en conjunto. Este jueves la Dijin de la Policía y la Interpol capturaron en Cali a siete integrantes de una familia que se dedicaba al lavado de activos y trabajaba para estos grupos narcotraficantes. De acuerdo con las investigaciones, este grupo familiar operaba mediante el fraccionamiento de giros enviados desde Houston (Estados Unidos) y Guadalajara (México). El dinero correspondería al pago entre el Cartel de Sinaloa y el Clan Úsuga. Los capturados –que eran los intermediarios- “recibían grandes cantidades de dinero a través de diferentes casas de cambio ubicadas en las ciudades de Cali y Buenaventura”, explicó la Policía. Pero este grupo no sólo se encargaba de los pagos. También reclutaba personas de barrios marginados en Cali y Buenaventura, a quienes les pagaban una pequeña cantidad de dinero para que prestaran sus cuentas bancarias y poder hacer giros a distintas cuentas sin que las autoridades sospecharan. “El dinero era consignado en diferentes cuentas con la finalidad de transformarlo en bienes y productos de fácil acceso en la economía, logrando incorporar un patrimonio de aproximadamente 1.500 millones de pesos”, dijo la institución. Entre las detenidas están ‘Gloria’, que era la cabecilla, además de sus hijos ‘Sandra’, ‘Cindy’ y ‘Alfonso’, que reclutaban personas. Adicionalmente, fueron capturadas tres sobrinas encargadas de los retiros del dinero consignado en el exterior. Todos ellos responderán por los delitos de lavado de activos, concierto para delinquir y enriquecimiento ilícito. “Estamos tras la pista de otros, para hacer capturas en Estados Unidos y en Guadalajara (México)”, dijo el coronel Pablo Ruiz, jefe del Área Delitos Especiales de la Dijín.