El exsecretario jurídico del expresidente Álvaro Uribe, Edmundo del Castillo, se encuentra en juicio por las interceptaciones ilegales a magistrados, políticos y periodistas, que se realizaron desde el extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS). Del Castillo declaró en su propio juicio y aseguró que después de una década de investigaciones llegó a la conclusión de que fue víctima de un complot porque las grabaciones que se hicieron con equipos del DAS ocurrieron antes de su llegada a la presidencia y nadie le informó.

“Cuando yo hablo con el DAS nadie me dice nada, en conclusión yo me enteré de las grabaciones, las recibí en esa reunión, pero posteriormente fue que me enteré de que estas grabaciones se hicieron con equipos del DAS y que habían sido entregados sin ninguna autorización, incluso antes de que yo llegara a la presidencia”, dijo el exsecretario jurídico del expresidente Álvaro Uribe.

El exfuncionario fue interrogado por tres capítulos particulares en la investigación por las denominadas chuzadas del DAS: los casos Tasmania, Paseo y Job. En los tres puntos el exsecretario jurídico advirtió que se enteró de varios elementos que justamente fueron publicados en los medios de comunicación, pero solo en el caso Job tuvo espacio directo y presencial en la discusión, porque él, apenas llegó a la presidencia en septiembre de 2007.

“Porque lo confesaron y lo dijeron los funcionarios del DAS y así lo presentó la prensa, hay dos cosas importantes: los equipos que fueron entregados y que yo no sabía. Pero además de enterarme que fueron grabados con los equipos del DAS, pues sí creo que estaban tratando de hacerle un complot al presidente y consideré necesario entregar ese material probatorio”, dijo Edmundo del Castillo.

El exsecretario jurídico del expresidente Álvaro Uribe, explicó lo que ocurrió en una reunión con el desmovilizado alias Job y de cómo un abogado fue quien solicitó dicha reunión para contar y presentar las supuestas evidencias de un plan para enredar al expresidente Uribe con grupos paramilitares. “Un fiscal de justicia y paz llamado Néstor Rangel a quien yo conocía como ciudadano, cuando litigada, me llama a la Presidencia de la República y me dice acá hay un defensor que dice que tiene una información en contra del presidente de la república”, explicó el exfuncionario.

Edmundo del Castillo contó cómo ocurrió la reunión en la presidencia de la república donde llegó el abogado con su cliente, alias Job. Fue encuentro que según el testigo no tardó más de 30 minutos donde recibieron algunos CDs con la información que dejaba como responsables a funcionarios de la Corte Suprema de Justicia de gestar un plan para ofrecer beneficios a delincuentes a cambio de declarar en contra del expresidente.

“Cuando llegó la hora, mi secretaria me dijo ya están acá, a mí me llamó la atención que había una funcionaria del Das que yo no conocía, era Martha Leal, llegó el doctor Álvarez con el señor que luego se supo era alias Job. Hicimos esa reunión por 30 minutos y dijo que conocía a César Mauricio Velásquez y quería saludarlo porque habían sido gestores de paz y llega a César Mauricio y se saludan, la reunión se acaba y lo que hace el doctor Álvarez es entregarnos los CDs donde estaban los supuestas pruebas del complot”, explicó el exfuncionario.

En este mismo juicio se encuentra como acusado el exsecretario de prensa de la presidencia, César Mauricio Velásquez. Su defensa ya completó la lista de testigos y el turno era para Edmundo del Castillo, sin embargo, el juez, de forma repetida, le llamó la atención a la Fiscalía por considerar que incumple las reglas básicas de los interrogatorios en un juicio y así se lo expuso en la misma diligencia.

Se espera que en los próximos días y una vez completado el escenario probatorio, el juez tome una determinación respecto a la responsabilidad César Mauricio Velásquez y Edmundo del Castillo, en las llamadas chuzadas del DAS.