Este miércoles, la Fiscalía General de la Nación, a través del Grupo Especial para la Lucha Contra el Maltrato Animal (Gelma), anunció la imputación de cargos contra el presunto agresor de un perro que, producto de un ataque con un arma de balines, perdió la vista en el municipio de Zipaquirá. Se trata de Thor, un canino de solo tres años que hace cuatro meses fue encontrado malherido en las calles de ese municipio, donde por fortuna recibió ayuda de miembros de la Asociación Protectora de Animales, que lo llevaron a tiempo a un centro veterinario en Chía para salvarle la vida.
Medios locales registraron el hecho el pasado 2 de marzo, cuando trascendió que el perro sufrió perforación de la córnea y múltiples heridas en el cuerpo. El veterinario que lo atendió, Brian Forero, explicó en su momento a la emisora Radio Santa Fe que el animal llegó con heridas de perdigones en la cara y el cuello. Tras el cruel ataque, “hoy Thor, ya recuperado y con las limitaciones producto de la agresión, se encuentra bajo la protección de sus cuidadores”, anunció el ente investigador, que desde el pasado diciembre puso en funcionamiento el grupo Gelma para judicializar casos como este.
Otros casos de maltrato animal Esta nueva unidad especial es integrada por 38 fiscales a nivel nacional, 38 investigadores del CTI y 44 agentes de la Policía, quienes operan desde cada una de las seccionales de la Fiscalía a nivel nacional. El 7 de marzo, pocos días después del caso de Thor, se dio la primera condena por maltrato animal en Colombia por parte del Juzgado Primero Promiscuo Municipal de Amagá, Antioquia, que sentenció a seis meses de prisión a un hombre identificado como David Andrés Flórez Acosta, de 31 años, por los delitos de maltrato animal agravado, con sevicia, y hurto calificado y agravado.
Según la Fiscalía, la investigación estuvo relacionada con el hurto de varios gatos, entre los que figura el del cura párroco del pueblo, los cuales fueron sacrificados y consumidos en la casa del sujeto. Recientemente, otro caso de maltrato animal generó indignación a nivel nacional cuando, a través de redes sociales, se conocieron imágenes de cuatro soldados que mataron a un perro en la base militar El Páramo, ubicada en la vereda Monopamba, de Puerres, Nariño.