Fueron seis hechos los que identificó la Fiscalía como elementos sustanciales de la solicitud de preclusión de la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe por la presunta manipulación de testigos, en casi cinco días de diligencia, el fiscal Gabriel Jaimes completó apenas con el segundo y que tituló: Retractación de Monsalve con intervención de Álvaro Hernán Prada y del cual concluyó que no hay declaración o evidencia que vincule al expresidente Uribe con los supuestos ofrecimientos a testigos para cambiar su versión.

“No hay audio o mensajes de voz en donde Álvaro Uribe diera instrucción a Álvaro Hernán Prada y todas esas declaraciones, todas al unísono explican de qué manera puede afirmar que el mensaje fue transmitido por Álvaro Hernán Prada como ya se ha dicho, de eso no hay versión no queda declaración alguna que acredite eso más que ese audio suelto así explicado”, dijo el fiscal.

En sus primeras intervenciones el fiscal Jaimes terminó compulsando copias para investigar las actuaciones de Deyanira Gómez y Juan Guillermo Monsalve, los dos testigos estrellas en este proceso contra el exmandatario.

“La otra conclusión de manera contundente que el señor Monsalve y su esposa Deyanira Gómez y posiblemente otras personas, que están por identificarse, alteraron evidencia y además con su utilización intentaron engañar a la sala de instrucción de la Corte Suprema de Justicia, por lo que este servidor compulsaran copias para que investigue por los delitos de fraude procesal y ocultamiento alteración y destrucción de elementos materiales probatorios”, señaló el fiscal.

Ahora y tras presentar una serie de pruebas: audios, videos y declaraciones, el fiscal concluye las versiones de Carlos Eduardo López alias Caliche, incluídas en algunas interceptaciones y mensajes de whatsapp, resultan contradictorias y confusas, respecto a las verificaciones de la Fiscalía para contrastar la información que estaban en poder de la Corte Suprema de Justicia.

“Por ejemplo dice que a Prada en el discurrir de este evento le escribió algunos mensajes por WhatsApp también y que progresivamente el doctor Prada dejó de contestar y que entonces ante esta situación el forzó algunas entrevistas personales que se asustaron más adelante los días subsiguientes y que finalmente ante la inminencia de ese encuentro en alguna oportunidad, él le dijo que ya dejarán así que había perdido confianza, que ya no le creía a Caliche lo que le decía lo que se le había planteado”, dijo el fiscal Jaimes.

Advierte que alias Caliche confesó que tuvo la “iniciativa” de buscar a Juan Guillermo Monsalve y conseguir esa retractación, no por otro motivo que apegado a su afinidad con el proyecto político del expresidente Uribe. “Primero con Hugo Tovar Marroquín porque no lo encontraron pero que finalmente lo afirmaron con Hernando Mauricio Marroquín y entonces dice que finalmente esta persona contacto vía telefónica porque no estaba en la ciudad Álvaro Hernán Prada Álvaro”.

Dijo el fiscal que es importante hacer una interpretación jurídica de las declaraciones que alias Caliche entregó y allí se estableció que sabía lo que ocurría por lo que veía en medios de comunicación, al igual que el conflicto que tenía con el senador Iván Cepeda. En una parte señala que Prada le ofreció la posibilidad de sacar a Monsalve a cambio de la declaración o retractación, pero ese dicho no quedó probado, más allá de un intento “descomunal” por ganarse la confianza del expresidente Uribe y por eso usó el nombre de personas cercanas al exmandantario.

“Lo que ocurrió por ese cúmulo de mensajes… le envié 200 mentiras para sacarle una verdad y no he podido, es la frase que condensa lo que es la versión del señor Carlos Eduardo López, alias Caliche”, dijo el fiscal.

El fiscal agregó que es muy difícil hacer un análisis técnico forenses a profundidad de los audios y mensajes WhatsApp que compartieron los interlocutores, Monsalve y alias Caliche, por cuanto los audios fueron remarcados y compartidos en espacios diferentes al jurídico, de ahí que Gabriel Jaimes, le pide a quienes tengan ese mensajes originales y los teléfonos usados, para que los entreguen y así se pueden analizar los elementos o evidencias desde el origen.