La batalla política que se desencadenó en el país en torno a la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por presuntamente haber incurrido en fraude procesal y soborno a testigos no da tregua.

Ahora se abre un nuevo frente en los tribunales. De un lado está el representante del Centro Democrático Edward Rodríguez, del otro el senador del Polo Democrático Iván Cepeda, principal antagonista en la pelea. Mientras se espera la decisión de la Fiscalía, que tiene plazo hasta el 4 de febrero para presentar la acusación o precluir el proceso contra Uribe por vencimiento de términos, Rodríguez enfrenta una demanda que interpuso Cepeda ante el Consejo de Estado que busca su muerte política y además una denuncia ante la Corte Suprema de Justicia.

El origen de la denuncia es la decisión de Rodríguez, como miembro de la Comisión de Acusación, de citar a versión libre al exmagistrado José Luis Barceló, el mismo que el expresidente Uribe ha señalado de ventilar el proceso en su contra y de manifestarle a periodistas que lo iba a meter preso.

Rodríguez citó a Barceló justamente para que explique las presuntas interceptaciones que le hicieron al exsenador Uribe, en las que, en un hecho sin precedentes, fueron aceptadas como legales escuchas que iban dirigidas al congresista Nilton Córdoba y que, por un supuesto error en el número telefónico, terminaron siendo al celular de Uribe.

En este careo entre Cepeda y Rodríguez, el senador opositor presentó un rastreo de actividades, declaraciones y trinos de Rodríguez en los que da por hecho la inocencia de Uribe y ataca a los magistrados que lo investigan acusándolos de tomar decisiones politizadas. Este caso quedó en manos del magistrado Héctor Alarcón, uno de los que respaldó la orden de detención contra el exmandatario. Rodríguez no se quedó quieto y le devolvió la misma moneda a Cepeda.

Lo denunció ante la Corte Suprema de Justicia por injuria y calumnia, falsa denuncia y fraude procesal.Cabe recordar que de esa sala, que deberá estudiar las dos denuncias, hace parte César Reyes, magistrado cuya ponencia ordenó la detención domiciliaria del expresidente Uribe.

SEMANA conoció la acusación contra Cepeda, de quien señala “no ha tenido límite en hacer difamaciones públicas en mi contra y asegurar que he sido autor de actos delictivos. Así mismo, ha tomado la atribución de lanzar juicios sobre cómo debe fallarse en el presente proceso, induciendo al error e intentando manipular la justicia a su favor, o mejor, en contra de todo aquel que no comparte sus ideas políticas”. Y retomando los dos frentes en los que se ha dividido la política en torno a la figura de Uribe, advirtió que Cepeda intenta oprimir a quienes no comparten sus ideales.

Rodríguez asegura que también “pretende cuestionar las funciones constitucionales como congresista investigador”. Sobre la competencia que tiene la Comisión de Acusación, de la que hace parte, Rodríguez señala: “Que las investigaciones buscan definir la legalidad de las interceptaciones, en ningún momento se procederá respecto al contenido, el cual no conozco y no tengo acceso, ni debo tenerlo, pues sobrepasa mi competencia”.

Una misma pelea con diferentes frentes de batalla que van desde debates en la arena política del Congreso hasta procesos en la Corte Suprema, en la Fiscalía y en la Comisión de Acusación en la arena de la justicia. Los protagonistas, el expresidente Uribe y el senador Iván Cepeda. Cada uno enfila a su guardia pretoriana para la batalla, que en esta ocasión la está dando el representante Rodríguez.