Los países garantes del proceso de paz con el ELN están fijando sus posiciones sobre la decisión del presidente Iván Duque de pedir la captura y extradición de los negociadores de esa guerrilla que están en La Habana. Luego del comunicado en que Noruega ratificó su compromiso de respetar los protocolos pactados con el grupo insurgente, Chile se pronunció también. "Manifestamos nuestro profundo rechazo al Ejército de Liberación Nacional (ELN) que ha reconocido la autoría de estos hechos y otorgamos nuestro total apoyo al gobierno de Colombia en su firme determinación de llevar a la justicia a los responsables de este brutal acto terrorista", dice el comunicado. En la mañana de este martes, Duque le pidió apoyo a la comunidad internacional y a Cuba para concretar las capturas de los 10 jefes elenos que están en la isla. "Como ha quedado sin ningún efecto jurídico cualquier vínculo en la mesa de La Habana con el ELN, hemos invocado no solo la gravedad de los hechos ocurridos, el llamado del Consejo de Seguridad, de la CIDH, y de las acciones de las autoridades en Colombia para que se reactiven esas órdenes de captura, y además se hagan las solicitudes de extradición. Esperamos que la comunidad internacional nos dé ese respaldo y hacemos ese llamado al gobierno cubano para que se haga justicia en Colombia", dijo el primer mandatario. Poco después de esa declaración, se conoció un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega, que mostraba la decisión de ese país de respetar los protocolos para el regreso de los líderes del ELN a la clandestinidad. "Ejerciendo este papel (de país garante), Noruega, junto con Cuba, Venezuela, Chile, Brasil y Ecuador, ha firmado varios documentos, inclusive el Protocolo establecido en caso de ruptura de la negociación de diálogos de paz Gobierno colombiano-ELN, en el que los firmantes asumen ciertos compromisos en la eventualidad de interrupción o fin oficial de las conversaciones. Como facilitador y garante consecuente, Noruega debe cumplir con sus compromisos", dice el comunicado dirigido a la Cancillería colombiana. En contraste, el gobierno de derecha de Chile, encabezado por Sebastián Piñera, se mostró más cercano a la posición de Duque. "Nuestro gobierno reitera su absoluto apoyo a la exigencia del Gobierno colombiano para que el ELN libere a todos los secuestrados y ponga término a todos los ataques terroristas y de violencia.Chile acompaña y solidariza con el gobierno y pueblo colombiano en su defensa de la democracia, la libertad y de su derecho a vivir y progresar en paz", dice el documento emitido por el país sudamericano. Cuba, otro de los garantes y la última sede de las negociaciones, ya había manifestado el pasado fin de semana que se acogería a los protocolos acordados entre las partes. En estos las condiciones para el regreso de los elenos a la clandestinidad en caso de rompimiento de la mesa, como finalmente sucedió tras el atentado que dejó 21 muertos. Entre sus puntos contempla un plazo de 15 días para volver a la clandestinidad, y que el país le brinde varias garantías de seguridad en el viaje.