En los últimos meses han sido constantes las quejas por la proliferación de ratas en varias zonas de Bogotá. En las últimas horas en redes sociales vecinos del sector del Centro Internacional manifestaron su molestia por el exceso de estos roedores, situación que genera preocupación por la transmisión de enfermedades.
“Problema gigantesco si no se controlan esos animales, también, es una oportunidad para que tomemos conciencia del manejo de las basuras tanto la @Bogota como la ciudadanía; “En esa misma cuadra, también desde arriba las palomas asedian por su parte del banquete, inusual verla así en semáforo”; “A 4 cuadras en la calle 69A con carreras 5 y 6 es lo mismo. Todas las noches salen las ratas luego de que los comercios vecinos sacan sus bolsas al andén. Esto pasa hace años con reclamos a @Uaesp para que revisen la disposición correcta de residuos pero nada pasa”. Estos fueron algunos de los comentarios de los usuarios en la red X (Twitter).
Acciones contra los roedores
Una de las enfermedades que puede ser causada por estos roedores es la leptospirosis. Esta es una enfermedad de origen bacteriano, transmitida principalmente por animales como el perro, roedores, porcinos y rumiantes; así, como por algunas especies silvestres. El principal vehículo para transmisión de esta bacteria es la orina de animales enfermos, que podría contaminar el agua, los suelos y los alimentos. Por esta razón, es de fácil transmisión a las personas.
“Antes esta enfermedad era asociada a zonas rurales, pero en los últimos años se ha trasladado a los escenarios urbanos. La bacteria sobrevive largo tiempo en el agua o en ambientes húmedos, por eso es importante estar atentos y evitar los focos de infección”, explicó Julián Fernández Niño, el subsecretario de Salud Pública.
En días pasados, la Secretaria Distrital de Salud, a través de las Subredes Integradas de Servicios de Salud, reiteró que trabaja en el manejo integral de roedores e insectos en exteriores. Dichas acciones se realizan diariamente por demanda en todas las localidades.
El protocolo es el siguiente:
1. Se adelanta el diagnóstico del lugar para saber si hay presencia o ausencia de estos animales.
2. Se verifican las condiciones del sector para identificar aquellas que potencialmente pueden facilitar la proliferación de los roedores e insectos y se analizan cuáles son las medidas que se deben ejecutar.
3. Si las condiciones son aptas y favorecen la intervención química, se aplica esta metodología y posteriormente, se entregan recomendaciones y orientaciones a la comunidad para el control de plagas.
Desde marzo, la Subred Integrada de Servicios de Salud Norte E.S.E. está atendiendo los requerimientos de los vecinos de la Calle 72 con carrera 11. Allí se realizaron tres intervenciones con control químico y se socializaron las recomendaciones de prevención con la comunidad. Sin embargo, en la última visita al sector se evidenció presencia de factores que fomentan la proliferación de roedores como: basuras y escombros en el separador, falta de mantenimiento en las zonas verdes y asentamiento de cambuches de habitantes de calle.