La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, celebró que la capital superó la alerta roja hospitalaria, luego de que las unidades de cuidados intensivos bajaran al 84 % de ocupación. Sin embargo, ante el riesgo de la llegada de la variante delta, que aumentaría los contagios, pidió al Gobierno volver a solicitar la prueba negativa de coronavirus a los viajeros internacionales, mientras que también solicitó que se levanten todas las barreras para la vacunación.
Las dos dosis de la vacuna contra la covid-19 serían la mejor protección contra la variante delta del SARS-CoV-2, pero la alcaldesa de Bogotá señaló que hay puestos de vacunación vacíos, “porque los convocados no se quieren vacunar y los no priorizados sí se quieren vacunar”. Por esa razón, le pidió al Ministerio de Salud que se le permita la inyección a todo aquel que la solicite, sin más etapas ni fases.
“Todas las vacunas sirven, todas son igual de buenas, todas nos protegen (...) por favor, vayan a vacunarse, todas las vacunas lo protegen más que la moringa”, sostuvo López en un evento en Suesca, Cundinamarca.
Asimismo y en la misma línea, insistió en el riesgo de la llegada de la variante cuando la ciudad aún no está preparada. “Volver a poner la prueba PCR negativa como requisito de ingreso a Colombia, porque Bogotá es la que más se afecta porque el aeropuerto internacional está acá”, sostuvo la mandataria.
Por otra parte y como tercer pedido al Gobierno, ratificó la alerta que lanzó el secretario de Salud, Alejandro Gómez, sobre el no pago a los prestadores privados y públicos por las dosis de vacunas aplicadas en la capital.
Al 12 de julio, en Bogotá se habían aplicado 4.’06.054 dosis y tan solo se había pagado el 5,3 % de las vacunas a los prestadores.
“Las EPS e IPS llevan vacunando desde febrero de este año y no les han pagado ni el 5 % de lo que han vacunado. El Ministerio de Salud tiene los recursos, el Gobierno nacional tiene los recursos, es simplemente cuestión de girarlos. Le rogamos que se ponga al día en los pagos”, aseguró López.
Sin embargo, a pesar de que el Gobierno sí tiene los recursos, el sistema de PAIWEB en donde se debe registrar la información no funciona adecuadamente y ha representado, junto con otras partes del proceso, un problema para el giro efectivo.
El pronunciamiento de la alcaldesa se dio cuando se conoció que Bogotá logró superar tres meses de altísima ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI) en la tercera ola de pandemia. Por ello, anunció que se habilitarán cirugías y tratamiento que requieren UCI y que han tenido que suspenderse.
No obstante, no se refirió a más aperturas de sectores económicos, exceptuando la presencialidad de las clases en los colegios de Bogotá. La mandataria aseguró que el cupo epidemiológico de la ciudad será priorizado para esto.
“Por ahora, Bogotá no va a abrir conciertos, discotecas ni fútbol, vamos a esperar a ver cómo nos va con el tema de educación y unas semanas más adelante, hacia agosto, examinaremos si pedimos o no un piloto”, agregó.