Para el 10 de julio de 2023 quedó programado el juicio en contra del general venezolano Clíver Alcalá por delitos relacionados con el narcotráfico. Así lo estableció una Corte del Distrito Sur de los Estados Unidos que resolvió las peticiones presentadas por el oficial, uno de los hombres más cercanos a Hugo Chávez, en las que pedía rechazar todas las acusaciones.

El general Alcalá ya se declaró inocente ante los estrados judiciales. El escrito de acusación indica que él, junto a un grupo de oficiales venezolanos y funcionarios del gobierno de Hugo Chávez y Nicolás Maduro se juntaron con narcos colombianos para enviar 250 toneladas de cocaína a los Estados Unidos. En el análisis de este caso, la Corte Federal ya rechazó los argumentos dirigidos a recamar la inmunidad por su rango.

“No estamos lidiando aquí con actividad criminal ordinaria. Estamos lidiando con conducta criminal ordinaria a los niveles más altos del gobierno”, señaló e juez en marzo pasado. Los actos por los que fue acusado, y deberá enfrentar un juicio, por los actos deshonestos que cometió totalmente alejados de su cargo y rango dentro del Ejército.

Nicolás Maduro presentó el supuesto contrato que incluía un grupo de mercenarios capturados, entre los que estaban dos norteamericanos, y en el que participó el general retirado Clíver Alcalá, quien se entregó a la justicia de Estados Unidos. Esta ofrecía 10 millones de dólares por él.

En mayo pasado la Corte Suprema de Justicia citó a declarar a Clíver Antonio Alcalá Cordones, militar venezolano, y a Marlon Marín, sobrino de Iván Márquez, en el caso contra Piedad Córdoba por la denominada farcpolítica. El despacho de la magistrada Lombana tiene la tesis de que posiblemente Clíver fue una especie de puente para Córdoba para gestionar negocios y obtener beneficios de la Comisión Nacional de Divisas.

Dichos montos habrían sido obtenidos, según la investigación, para enriquecer “ilegalmente a la investigada y a su círculo familiar y, por otra parte, a la realización de diversos eventos de carácter político que buscaban que Piedad Córdoba obtuviera una posición de poder privilegiada en Colombia”.

Pero Clíver no es el único testigo del caso que, entre otras cosas, sería un declarante cercano a la relación que podría haber tenido Córdoba, senadora colombiana vinculada con el régimen de Chávez y, posteriormente, de Nicolás Maduro.

También el alto tribunal había citado previamente al exgeneral Hugo ‘El Pollo’ Carvajal. De hecho, SEMANA conversó con la abogada María Dolores de Argüelles, abogada del exgeneral chavista. Cabe recordar que la magistrada Cristina Lombana adelantó una diligencia en Madrid en la que el exgeneral se abstuvo de hablar en el marco de una investigación contra Gustavo Petro por supuesta financiación de Venezuela al ahora candidato presidencial del Pacto Histórico.

“Le preguntaron si quería contestar a las preguntas de la magistrada y él manifestó que de momento no quería responder, en tanto no hubiera garantías o no quería, mejor dicho, hacer alguna manifestación al respecto. Luego, el procurador le pregunta lo mismo y dice que no quiere contestar. Por último, el abogado de Petro le preguntó si era cierto que no tenía información”, dijo a SEMANA la abogada de Carvajal, uno de los hombres fuertes del chavismo.

Y agrega: “Él dijo que sí tenía información, pero no quería contarla en ese momento. Porque él está en una situación complicada, están solicitando una extradición a Estados Unidos. Desde el primer momento ha confesado que quiere hablar y colaborar con todo el mundo, pero quiere que a Estados Unidos le parezca bien porque no quiere que ese país le diga que por qué estando pendiente de llegar allí dio información que les puede parecer bien, mal o regular”.