El Colegio de Generales de la Policía Nacional se refirió sobre los recientes hechos de violencia registrados contra uniformados de la Fuerza Pública.
El jueves 8 de junio se presentó una protesta en las inmediaciones de la Universidad Nacional en Bogotá por el Día del Estudiante Revolucionario, la cual tuvo como protagonistas a integrantes de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO) de la Policía Nacional y población civil encapuchada.
La situación se mantuvo en control hasta que un funcionario resultó gravemente herido por el impacto de un artefacto explosivo conocido como papa bomba en su rostro. El uniformado en cuestión fue Jhon Rodríguez Sandoval, quien fue socorrido por sus compañeros y trasladado a urgencias. Del mismo modo, José Herrera también resultó herido por las esquirlas que generó la denotación de otro explosivo.
Tras lo ocurrido, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, reprochó por completo e hizo un llamado a dar con el paradero de los responsables que perpetraron el ataque. Por medio de sus redes sociales, informó que se puso en marcha una recompensa de hasta 20 millones de pesos para quien suministre información relevante para capturar a los delincuentes.
Además, la mandataria le solicitó al director de la Policía Nacional llegar a un acuerdo con la rectoría de la Universidad para que los uniformados cuenten con el aval de ingresar a las instalaciones y detener a las personas encapuchadas. La petición fue rechazada por el general William Salamanca.
Del mismo modo, López señaló que mientras se le siga dando gabela al ‘Movimiento Bolivariano’, el cual estaría vinculado a las FARC, este movimiento seguirá infiltrándose en los campus universitarios para violentar a las ciudadanía y Fuerza Pública.
“Hasta cuándo el Gobierno nacional y la justicia van a hacer algo contra esos delincuentes!”, trinó la mandataria al reiterar su rechazo sobre el acto perpetrado, “Tenemos un policía gravemente herido, entre la vida y la muerte, a la comunidad universitaria y a la ciudad atormentada por estos delincuentes que no son estudiantes y no tienen nada que ver con la comunidad universitaria. Hasta cuándo complacencia y gabelas “de paz” en vez de justicia eficaz que someta a estos delincuentes”.
Con respecto a este hecho, el Colegio indicó que rechaza categóricamente el acto perpetrado contra los funcionarios, indicando que los responsables solo pueden ser calificados como terroristas que emplearon armas convencionales y no convencionales en contra de funcionarios de la fuerza pública. Además, reprochó los hechos que ocurrieron similarmente en Medellín y Cali.
Asimismo, expresó su consternación y profunda preocupación porque “el terrorismo parece que ha encontrado en los medios académicos una especie de escudo para eludir los controles que la Constitución y la ley establecen como responsabilidad de las autoridades colombianas”. Por lo tanto, el Colegio ofreció su solidaridad y respaldo a los estudiantes que con coraje han hecho esfuerzos para impedir que estos actos se presenten con frecuencia en los claustros universitarios.
También aprovecharon para agradecer a la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien ha mantenido en firme su posición contra el terrorismo y caos, en pro de defender el orden, convivencia y respaldando la autoridad legítima del Estado.
“Reafirma a todas las autoridades de la república, especialmente a nuestros policías y soldados, su incondicional apoyo y a quienes han resultado gravemente lesionados en el cumplimiento de su deber su sincero deseo por una pronta recuperación”, expresó el Colegio de Generales al reiterar su preocupación por el “inexplicable silencio” de las organizaciones defensoras de derechos humanos, señalado que no han reprochado los atentados contra los policías.