Colombia es uno de los pocos países del mundo en donde confluyen tres placas tectónicas, al igual que Turquía, lo cual significa que en el país hay un riesgo sísmico entre medio y alto, dependiendo de la región de la que se hable.
¿Qué dicen los expertos?
SEMANA habló con José Fernando Duque Trujillo, Director del Área de Territorios y Ciudades de la Universidad EAFIT, geólogo, doctor y magíster en Ciencias de la Tierra de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Fernández explica cómo funciona el fenómeno de la confluencia de las tres placas tectónicas: “Colombia tiene tres placas tectónicas, la placa Suramericana, la placa de Nazca y la placa del Caribe en la parte norte; esto hace que, como cada placa tenga un movimiento que es independiente, y se muevan a diferentes ritmos cada una, estamos sujetos a que haya mucho movimiento de esas placas y por lo tanto muchas fallas y muchos sismos asociados a esas fallas. Si vamos a hablar de sismos, el riesgo es claro porque cada vez que se mueve una placa, podemos tener un sismo en varias partes del país”.
También, la frecuencia de deslizamiento y la dificultad en la construcción de carreteras, está relacionado con esa existencia de las tres placas tectónicas en el país, dice Fernández.
SEMANA habló también con Cristian Farías, doctor en Geofísica por la Universidad de Bonn en Alemania y director del Departamento de Obras Civiles y Geología de la Universidad de Temuco en Chile, sobre el riesgo sísmico de Colombia, que es evidentemente alto.
De acuerdo con Farías, aunque en Colombia no se hayan vivido recientemente “grandes terremotos”, sí pueden ser una gran amenaza para la población, por la mezcla de construcciones sismorresistentes, con muchas autoconstrucciones que sufren mayores riesgos de daños ante movimientos sísmicos.
“Si contrastamos Colombia con su historia reciente de terremotos con países como Chile, como Japón, claro, Colombia no tiene terremotos tan potentes como los que ocurren en esas zonas”, dice Farías y añade: “El riesgo va a depender mucho de como tú te prepares, si estás en construcción sismorresistente, si hay mucha construcción en muchos lugares, si tienes control sobre cómo estás construyendo, esas son las cosas que van a ayudar a que tengas menos riesgos”.
Las regiones de Colombia que tienen más riesgo
El riesgo sísmico en el país no se puede generalizar y depende de la región de la que se está hablando. En la parte de los Llanos el riesgo sísmico es bajo. El mayor riesgo sísmico se encuentra sobre los Andes, donde están todas las montañas, aclara Fernández.
El mayor riesgo sísmico está a lo largo de todos los Andes, según explica Fernández: “Desde Ipiales, Pasto, toda esta zona pasando por el Cauca, el Valle del Cauca, Antioquia y toda la parte de Chocó, porque ahí estamos entre la cordillera de Nazca y la cordillera Central, donde pasan las fallas de Romeral que tienen mucha actividad”.
El experto también menciona la zona de Santander por su alta sismicidad: “La parte de Bucaramanga siempre tiene una actividad sísmica muy alta, pero ahí tiene otra fuente, la fuente no es una falla, sino que es un punto en el manto, la parte más profunda de la tierra; de hecho, el sismo de esta mañana (viernes 10 de marzo) fue bastante profundo, 160 kilómetros de profundidad, pero no se sabe muy bien qué hay ahí, porque está tan profundo que es muy difícil tener tecnología para saber que está pasando por allá abajo”.
Sismorresistencia, la mejor preparación
Ambos expertos insisten en que en cuanto a la prevención, lo más importante es considerar las normas de sismorresistencia al momento de seleccionar la vivienda, más allá de contar con kits de prevención.
Al momento del movimiento sísmico, Farías aclara el punto más importante: “Cuando comienza un terremoto tienes que resguardarte, de manera que no te caiga nada encima, eso es lo que más tienes que procurar... si puedes estar afuera en un lugar donde no caigan cosas, hazlo”.
“En términos generales tenemos una buena normativa que se cumple, la mayoría de las veces”, dice Fernández, aunque reconoce que en ciudades como Medellín no se ha cumplido con cabalidad, lo que implica un riesgo al momento de movimientos sísmicos fuertes.