En la Comisión Primera de la Cámara de Representantes se aprobó en primer debate una polémica proposición: ampliar el mandato de los actuales alcaldes y gobernadores hasta el 2022, para así unificar los periodos con el presidencial. La propuesta para homologar las fechas de las elecciones es variopinta, viene de un grupo de representantes de La U, Cambio Radical, el Partido Conservador y el Centro Democrático. La comisión aprobó con 24 votos a favor y 8 en contra la ponencia original que plantea que el mismo día de la elección de Congreso se haga la de alcaldes y gobernadores. Pero el diablo está en los detalles. Es decir, en el artículo transitorio que dice que quienes están en los cargos en la actualidad los conserven hasta el 19 de julio de 2022. Es decir, que en el 2019 no habría elecciones. “Continuarán en sus funciones hasta el 19 de julio de 2022. Sus sucesores se elegirán en el año 2022 para el período constitucional, que iniciará el 20 de julio de ese año. En todo caso, los períodos de gobernadores y alcaldes deberán coincidir con el del Presidente de la República”, se lee en el documento. Le recomendamos: ¿Alcaldes atornillados en el poder? A esta propuesta no la han calificado de ‘mico’ sino de ‘orangután’, como dice el representante de la Alianza Verde Inti Asprilla. Quienes critican el proyecto aseguran que hay intereses detrás de la propuesta, justamente de quienes se quieren quedar en el poder por dos años más. Los representantes no aprobaron las propuestas de la congresista por la Alianza Verde Juanita Juanita Goebertus que pretendía dar una alternativa para unificar los periodos pero sin ampliar el de los actuales alcaldes con esta fórmula: 1) no extender los periodos de quienes se encuentran actualmente ejerciendo los cargos; 2) extenderlo a cinco años para presidente, vicepresidente, senadores y representantes desde 2022; y 3) extenderlo a cinco años para alcaldes, gobernadores, diputados y concejales desde 2028. Con una diferencia de meses entre los procesos de elección nacional y local, ambos niveles gobernarían desde ese año hasta 2032, y así sucesivamente. Su propuesta pretendía quitar el fantasma de los intereses directos de atornillar en el poder a quienes hoy lo ostentan.
La fórmula de Goebertus no convenció aunque fuera la más conciliadora. "Pueden llamarme ingenua, yo creo que en vez de solo oponerme trato de hacer una propuesta para salvar lo que puede ser deseable. No creo que sea una reforma cosmética, por eso creo que los cambios deben ser grandes", le contestó Goebertus a quienes criticaban su propuesta por considerarla un "adefesio", como la calificó Ángela María Robledo, quien desde el primer momento se ha mostrado en desacuerdo con la unificación y ampliación de periodos y escribió una ponencia negativa que salió derrotada por 26 votos contra 7. Puede leer: Propuesta para ampliar periodos de alcaldes y gobernadores se convirtió en discusión sobre Peñalosa Y es que varios representantes advierten que con la ampliación de los periodos de los actuales mandatarios el Legislativo está reemplazando al constituyente primario, a los ciudadanos que eligieron a sus alcaldes y gobernadores por cuatro años y no por seis años y siete meses. "Aquí en media hora se quiere cambiar la Constitución. Hay una deficiencia mental de quien lo hace porque no ha tenido tiempo ni de convencer ni de que lo convenzan (...) Están tomando una decisión por beneficio de ustedes, para tener algún alcalde que les haga campaña", aseguró el representante por el Polo Germán Navas Talero. Sin embargo, por tratarse de una reforma a la Constitución (artículo 261) todavía resta un largo camino, se necesitan siete debates más y en este tránsito se podría modificar la polémica propuesta que alargaría el mandato de Enrique Peñalosa, Alex Char, Mauricio Maurice Armitage, Federico Gutiérrez y otros mil alcaldes más.