Este viernes se puso en marcha en la capital del Atlántico la estrategia Rutas Seguras, en la que se brinda acompañamiento a 22 rutas de transporte público con el Ejército, la Armada Nacional y la Policía Metropolitana de Barranquilla, con el propósito de contrarrestar los hechos delictivos que se han registrado contra las empresas de buses.
“Nos encontramos desde las 4:00 de la mañana haciendo los patrullajes en Soledad y en Barranquilla, generando las Rutas Seguras establecidas para nuestro servicio urbano, y seguridad a nuestros transportadores y pasajeros”, señaló el coronel Óscar Daza, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
En total, son 150 uniformados que integran la estrategia. Agentes encubiertos, patrullajes, plan de registro a persona e identificación son algunas de las acciones que implementan las autoridades para golpear a los delincuentes y sacar de circulación las armas ilegales. “Seguiremos desde las 4:00 de la mañana garantizando esa seguridad”, puntualizó el comandante.
Cabe resaltar que desde el pasado jueves, 28 de julio, los conductores adscritos a las empresas Coolitoral y Cootrab se mantienen en paro por el temor que tienen de transitar por la ciudad, específicamente en Soledad.
Incluso, algunos le solicitaron al alcalde de ese municipio, Rodolfo Ucrós, que prohíba la circulación del parrillero hombre para evitar más atentados.
El cese de actividades generó, desde tempranas horas, congestión en el tráfico de pasajeros, trabajadores, estudiantes y todas las personas que usan las dos líneas para movilizarse desde el municipio de Soledad a Barranquilla y viceversa.
Sobre la vía Circunvalar, las filas de pasajeros fueron largas y parecían sin fin. Algunos caminaron por los costados de la carretera varios metros hasta encontrar una ruta que les llevara a sus destinos.
En total, han sido cinco actos violentos que se han presentado, en los cuales dos conductores resultaron asesinados el pasado sábado 23 de julio.
La primera víctima fue José del Carmen Hernández Padilla, en la vía La Cordialidad, a la altura del barrio el Romance, en el suroccidente de Barranquilla.
De acuerdo con las primeras versiones, Hernández Padilla, quien trabajaba para la empresa Coolitoral, transitaba por la calle 99 con carrera 6 cuando fue abordado por dos sujetos armados. Los delincuentes subieron al vehículo con intenciones de cometer un hurto, lesionaron al conductor con arma de fuego y posteriormente huyeron en motocicleta.
El segundo caso fue el de Willington José Hernández Borja, el conductor de un bus de Cootrab asesinado de varios impactos de bala, cuando circulaba por la calle 50 con carrera 11, sector conocido como 7 bocas, en Soledad 2.000.
El alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, señaló que se logró determinar mediante trabajos de inteligencia de la Policía que las acciones criminales que se han adelantado contra los transportadores son con fines extorsivos. Enfatizó en que los autores intelectuales y materiales están identificados.