La inseguridad sigue siendo un tema de preocupación en el país debido a los casos que se han registrado no solo en las diferentes ciudades, sino en las carreteras, debido a la acción de delincuentes que asaltan buses de servicio intermunicipal o vehículos de carga.
Es el caso de un hecho que se registró en el sector de Siberia a la salida de Bogotá por la calle 80, donde ladrones disfrazados de policías montaron un falso retén.
De acuerdo con la información preliminar, el conductor de un camión fue víctima de la acción de los delincuentes que se hacían pasar por policías, que lo obligaron a orillarse, supuestamente, para adelantar un procedimiento de control y registro.
Al narrar los momentos de angustia que vivió, dijo que, pensando que efectivamente se trataba de las autoridades, se detuvo y se dispuso a bajarse del camión, tal como se lo pidieron los falsos uniformados.
“Iba saliendo a Siberia, pusieron un Spark adelante y una moto. Dejaron un solo carril, me dijeron: ‘Siga’. Iba frente al Spark y me dijeron: ‘Bájese, lo vamos a requisar’. No me dejaron ni bajar, me cayeron como siete, me dieron un cachazo y me metieron al carro”, contó a la emisora Blu Radio.
Agregó: “Me pusieron una chaqueta en la cabeza y me metieron de cunclillas, después empezaron a dar vueltas”.
Según señaló, lo amenazaron varias veces y alcanzaron a trasladarlo hasta el sector de Galerías, de Bogotá.
Señaló que afortunadamente dos patrulleros que realizaban labores de vigilancia por el sector le salvaron la vida cuando aún permanecía en el vehículo de los ladrones.
“Me decían que no levantara la cabeza. Gracias a Dios, dos policías de cuadrante que hacían rondas vieron el carro sospechoso y los bajó. Se bajaron los manes y me dijeron que no levantara la cabeza, que me hiciera el borracho”, narró el conductor de 63 años de edad.
Añadió que “un policía se acercó al vidrio y yo le hice señas. Se dio cuenta y los puso contra la pared. Me salvó, porque me iban a matar”.
Las autoridades informaron que el camión hurtado fue encontrado en el sector de San Cristóbal, al sur de Bogotá.
Entre tanto, los cuatro delincuentes fueron capturados y trasladados a la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Paloquemao, donde se les imputarán cargos y se procederá a la audiencia de legalización de captura.
Crecieron puntos calientes de microtráfico y hurtos en Bogotá
Este hecho se conoce tras revelarse un informe según el cual crecieron puntos calientes de microtráfico y hurtos en Bogotá. En los últimos años aumentaron en 153 % los puntos calientes de crimen, delito y microtráfico en la capital.
Así lo denunció el concejal del Centro Democrático Óscar Ramírez Vahos, quien dijo que esto ha contribuido a que el 88 % de los ciudadanos se sienta hoy inseguro en la ciudad y a que el 70 % considere que su barrio se ha convertido en un sitio inseguro para su familia.
“Día a día los bogotanos han tenido que vivir en carne propia la inseguridad que, más que percepción, es una triste realidad. En los últimos años pasaron de ser 228 en 2019, a ser 578 en 2021, lo que demuestra que el crimen en Bogotá no para de crecer”, indicó el cabildante.
Según el concejal, las calles (22 %) y los puentes peatonales (20 %) son los lugares que mayor sensación de inseguridad generan a la ciudadanía. Así mismo, el delito que más preocupa a las personas en el espacio público es el hurto a personas (38 %).
Sin embargo, se está evidenciando una mayor preocupación de los bogotanos por delitos asociados al vandalismo (9 %) y la venta de drogas (9 %).
“Entre las razones para explicar este aumento en las cifras de percepción de inseguridad se encuentra un incremento en el número de puntos calientes o del crimen, es decir, aquellos lugares donde se mezcla un alto índice de criminalidad y delincuencia”, aseguró el concejal Ramírez Vahos.
Agregó que “se estima que solo el 2 % de las cuadras de Bogotá concentrarían el total de homicidios y un cuarto de los crímenes registrados. Es decir, que en estos puntos tienen un papel relevante las actividades delictivas asociadas al hurto, el homicidio y el microtráfico”.
Recordó que la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), el Departamento Nacional de Planeación y expertos en materia de seguridad han calculado que el narcotráfico podría representar entre 2 y 3 % del PIB. Por su parte, el narcomenudeo representaría el 0,75 % del PIB.
Eso significa, señala el informe, que la renta de este negocio ilegal puede ascender a 23,5 billones de pesos y 8,8 billones de pesos, respectivamente.
El concejal pidió tres intervenciones de las autoridades y la Administración Distrital para reducir la inseguridad en Bogotá:
- Estrategias concentradas en la prevención del crimen que permitan identificar y atender factores de riesgo tales como la falta de oportunidades sociales, económicas e institucionales, así como las problemáticas asociadas a la violencia intrafamiliar.
- Estrategias enfocadas en personas, en las que se priorice la atención a la salud mental y la protección de los entornos familiares, con especial énfasis en aquellos espacios.
- Estrategias enfocadas en intervenir lugares específicos, focalizando acciones en materia de seguridad y convivencia sobre aquellos puntos que están concentrando la criminalidad de la ciudad.