“Hace 13 años como a esta hora (4:00 p. m.) nos estábamos despidiendo, dándonos el último beso y el último abrazo para no volverlos a sentir más nunca en esta vida... Con los años comprendí por qué me abrazaste tan fuerte. La única despedida que no se me olvida ni olvidaré nunca. Solo me consuela sentir que ese beso y ese abrazo lo sigo compartiendo con Jorge Luis”. Con estas emotivas palabras, Luis Colmenares, padre de Luis Andrés Colmenares, recordó en las redes sociales a su hijo, en el aniversario de su trágica muerte.
Este año se cumplen 13 años desde la noche del 30 de octubre de 2010, la última vez que Luis Andrés Colmenares fue visto con vida por sus padres, marcando un punto de inflexión en sus vidas y en la crónica de uno de los casos más sonados de Colombia.
El mensaje de Luis Colmenares no solo evoca el último encuentro con su hijo, sino también despierta la memoria de un caso que ha sido objeto de intensos debates, investigaciones y juicios a lo largo de los años. La muerte de Luis Andrés Colmenares, un joven de 20 años que perdió la vida tras asistir a una fiesta de disfraces en una discoteca de Bogotá, se convirtió en un enigma que dividió opiniones y generó controversia en el país.
Inicialmente, las autoridades determinaron que su fallecimiento fue producto de un accidente, sosteniendo la teoría de que había caído y se había golpeado la cabeza en un barranco cercano al parque El Virrey. Sin embargo, la versión de la familia Colmenares contradecía esta explicación, planteando la posibilidad de un homicidio.
Este desacuerdo llevó el caso a juicio, y durante años, Colombia siguió con atención el proceso legal que involucró a dos de las amigas de Luis Andrés, Laura Moreno y Jessy Quintero, acusadas de falso testimonio y encubrimiento del presunto asesinato de Colmenares. En 2017, ambas fueron absueltas en primera instancia y en 2021, la justicia confirmó ese fallo, dejando el caso sin una resolución definitiva sobre la causa de la muerte de Colmenares.
El veredicto del Tribunal de Bogotá en 2021 confirmó la absolución de las dos acusadas y determinó que dentro del expediente no había elementos suficientes para establecer si la muerte de Colmenares fue un homicidio o un accidente. La falta de pruebas concluyentes llevó al cierre del caso, ya que no se presentó la apelación correspondiente ante la Corte Suprema de Justicia.
En medio de este proceso legal, las únicas condenas relacionadas con el caso fueron las de tres falsos testigos que, en su momento, fueron presentados ante la Fiscalía. A pesar de esta conclusión oficial, la familia Colmenares continúa clamando por justicia y sosteniendo que lo que le ocurrió a su hijo fue un homicidio, no un simple accidente en el que cayó y se golpeó la cabeza.
La muerte de Luis Andrés Colmenares se ha convertido en un símbolo de la búsqueda de justicia en Colombia y ha dejado una marca indeleble en la memoria de muchas personas en el país. A lo largo de los años, el caso ha generado intensos debates en la sociedad y ha planteado cuestionamientos sobre la efectividad del sistema de justicia en Colombia.
El mensaje de Luis Colmenares en las redes sociales, recordando a su hijo en el aniversario de su muerte, refleja el dolor y la lucha continua de una familia que no ha cesado en su búsqueda de respuestas y justicia. A pesar de los años transcurridos, el recuerdo de Luis Andrés Colmenares perdura en la memoria de su padre y en la conciencia de un país que aún se pregunta qué sucedió realmente en aquella trágica noche de octubre.
La publicación de Luis Colmenares no solo conmueve por su emotividad, sino que también invita a la reflexión sobre la importancia de la justicia, la verdad y el apoyo a las víctimas en casos que conmocionan a la sociedad. A pesar de los obstáculos y las incertidumbres que rodean la muerte de su hijo, la familia Colmenares sigue recordando y honrando su memoria, manteniendo viva la esperanza de que algún día se esclarezcan los hechos que rodearon su trágica partida.
El caso de Luis Andrés Colmenares, que ha perdurado en la memoria colectiva de Colombia, es un recordatorio de la necesidad de una justicia efectiva y de la importancia de mantener viva la memoria de las víctimas, como lo hace Luis Colmenares en su conmovedora publicación en las redes sociales.