Rodrigo Jaramillo Correa, cerebro del caso Interbolsa, fue condenado a siete años de prisión domiciliaria y está obligado a pagar una multa de 12.000 salarios mínimos. Esa fue la decisión que tomó el Juzgado 26 de conocimiento en Bogotá. Pues aunque Jaramillo tenía una condena inicial de 11 años, el juez le otorgó una rebaja de pena del 40 % por haber aceptado los delitos de manipulación fraudulenta y administración desleal. Aunque el pasado mes de junio el juez ya había establecido que el sentido del fallo contra Jaramillo era condenatorio, faltaba precisar la pena que tendría. Este no es el primer golpe para Jaramillo. En diciembre pasado la Superintendencia Financiera dejó en firme la inhabilidad impuesta al ex presidente del Grupo Interbolsa por el término de cinco años -máximo previsto en la ley del mercado de valores- para realizar funciones de administración, dirección o control de las entidades sometidas a la inspección y vigilancia permanente de esta Superintendencia. Ese fue el primer golpe que recibió el señalado por haber manejado información privilegiada, a la cual tuvo acceso en su calidad de miembro del consejo directivo de la Bolsa de Valores de Colombia y con la que pudo influir en favor de su firma, Interbolsa. Días antes la Superintendencia de Sociedades lo inhabilitó por diez años para ejercer actividades de comercio por haber cometido todo tipo de actos fraudulentos con miles de millones de los ahorradores de Interbolsa. Jaramillo, quien nunca fue a la cárcel y vive bajo arresto domiciliario en un lujoso apartamento en Medellín, fue condenado por haber manipulado créditos obtenidos sobre la acción de Fabricato que no podía apalancar. Al mismo tiempo, incrementó ilegalmente el precio de esta acción para obtener beneficios. "Se pudo concluir que existió un manejo amañando operacional entre la compra y venta de acciones entre los directivos de la compañía, afectando el precio de la acción de Fabricato", dijo la fiscal Ladino. Dentro de la investigación la Fiscalía determinó que Jaramillo y Alessandro Corridori manipularon préstamos por 248.000 millones de pesos, que fueron utilizados por los directivos de Interbolsa para su uso personal. Queda pendiente un juicio por operaciones no autorizadas y concierto para delinquir. Estos dos delitos son mucho más complicados para Jaramillo y le podrían acarrear muchos años de cárcel.