Mediante un comunicado, la Contraloría General afirmó que luego de haber encuestado a 12.230 profesionales de la salud en todo el país se concluyó que cerca de la mitad de los encuestados han tenido que conseguir los implementos de bioseguridad por ellos mismos.
Elementos como caretas, tapabocas, guantes y vestidos quirúrgicos, entre otros, son los que más se han necesitado durante estos meses de pandemia. Sin embargo, los otorgados por el Gobierno no han sido los suficientes. Según indica la encuesta, los médicos "manifiestan que han invertido entre 8 mil y un millón de pesos en los implementos que han debido adquirir, discriminados de la siguiente manera: bata manga larga 1135, careta de protección 2379, guantes 848, mascarilla quirúrgica 1665, monogafas 2051, otro 1641, polainas 477, respirador N95 2881 y vestido quirúrgico 1223".
Otro punto es que el 63 % de los encuestados aseguraron que necesitan tener más implementos que les garanticen mayor seguridad a la hora de atender a los pacientes. "Esto se presenta de forma repetitiva en los departamentos de Antioquia, Santander, Caldas, Valle del Cauca, Boyacá, Cesar, Norte de Santander, Caquetá, Casanare y Meta", indicó. La Contraloría también aseguró que el 92 % del personal de salud del país aún no se ha realizado la prueba del coronavirus, un punto preocupante teniendo en cuenta que son los que en estos momentos están atendiendo numerosos pacientes diarios.
Asimismo, el informe señala que el 43 % de los indagados se encuentran desempeñando sus labores por contratos de prestación de servicio, tercerizados o en provisionalidad. "Al 45 % le han modificado las condiciones laborales (reducción de horas de trabajo y sueldos, entre otras) y el 22 % manifiesta que el pago de sus honorarios no es puntual (en su mayoría les adeudan de 1 a 3 meses)’’. Finalmente, la Contraloría señaló que este ejercicio cobijó a médicos, cirujanos, anestesiólogos, enfermeras, auxiliares administrativos de hospitales, entre otros, quienes confirmaron los hechos anteriormente expuestos.