La demarcación de los puestos de comerciantes es la nueva medida anunciada por la Alcaldía de Barranquilla dentro del proceso de reactivación del centro de la ciudad. Esta nueva etapa forma parte del paquete de medidas que buscan la reactivación de la capital del Atlantico, después de un buen número de semanas en medio de una crisis por el alto número de contagios y muertes. En Barranquilla, el Ministerio de Salud confirma 3.488 casos positivos de coronavirus y 1.552 personas fallecidas, con una tasa de letalidad del 4,63 por ciento, lo que ha convertido a la capital del Atlántico en el segundo foco del virus a nivel nacional, solo por debajo de Bogotá. La idea es que los puestos de los comerciantes sean señalizados en forma consecutiva con los números 1 y 2 para establecer los días en que cada uno de ellos podrán abrirlos. Los del número 1 podrán trabajar los lunes, miércoles y viernes; los del número 2 los martes, jueves y sábados; para la semana siguiente se invertirá el modelo con el fin de que sea equitativo. Los puestos también estarán marcados con el distanciamiento requerido para hacer la compra. Los domingos quedaron estipulados como días de descanso y para jornadas de desinfección por el alto número de personas que concurren a este sector. Esta reapertura, según la administración distrital, está determinada por la implementación de todos los protocolos de bioseguridad, como el uso correcto de tapabocas, el distanciamiento físico y el lavado de manos constante.
Zona demarcada en uno de los puestos incluidos en la etapa de reactivación de los vendedores informales en el centro de Barranquilla. La reactivación escalonada, como ha sido denominada, aplica para los vendedores informales del centro de la ciudad, ubicados en las zonas de peatonalización comprendidas entre la calle 33 con carreras 40 y 41, la calle 33 con carreras 42 y 43, la carrera 41 entre calles 32 y 30, la carrera 41B entre calles 31 y 30, y la calle 42 entre carreras 32 y 33. Como medida complemetaria fue anunciada la instalación de lavamanos en la zona peatonal y en otros puntos del centro donde sea necesario. “Los vendedores mayores de 60 años o personas con alguna enfermedad que los haga más vulnerables al virus no podrán ir a laborar por ser población de alto riesgo. Sin embargo, podrán asignar a otra persona para atender su puesto”, señaló la Alcaldía en un comunicado.