La Sala Reconocimiento de la JEP negó la solicitud de nulidad interpuesta por el coronel (r) José Pastor Ruiz Mahecha a la imputación que se le hizo como uno de los máximos responsables de ejecuciones extrajudiciales, conocidos como ‘falsos positivos’, cometidos por el batallón La Popa, y ante la falta de reconocimiento de su responsabilidad en los graves hechos, la Sala decidió remitir su caso a la Unidad de Investigación y Acusación (UIA).
El exoficial había tramitado dicha solicitud argumentando que la JEP no tenía competencia para obligarlo a comparecer, ya que prefería quedarse en la jurisdicción penal ordinaria. Ruiz Mahecha sostuvo que una vez dicha jurisdicción resuelva la acción de revisión de una de las condenas en su contra, decidirá si se acoge o no a la JEP.
Sin embargo, la Sala reiteró que la JEP tiene competencia prevalente y preferente respecto de los miembros de la fuerza pública que están involucrados, dentro del conflicto armado, en graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario como es el caso de Ruiz Mahecha, según se determinó en el Auto 128 del 7 de julio de 2021. Además, el sometimiento de los integrantes de la fuerza pública es obligatorio y no voluntario.
En la misma decisión, y teniendo en cuenta que el coronel (r) no admitió su responsabilidad por los crímenes de lesa humanidad de asesinato y desaparición forzada, y el crimen de guerra de homicidio, la Sala decidió remitir su situación a la UIA en donde podrá enfrentar un juicio adversarial. De ser vencido en juicio podría ser condenado hasta con 20 años de cárcel.
Con él, ya son tres los exaltos oficiales del batallón La Popa, con sede en Valledupar, que deberán enfrentar un juicio adversarial al no reconocer su responsabilidad por su liderazgo y participación en el plan criminal en el que fueron asesinadas y desaparecidas forzadamente 127 personas que luego presentaron como resultados operacionales legítimos, entre enero de 2002 y julio de 2005. Los otros dos son los también coroneles (r) Publio Hernán Mejía Gutiérrez y Juan Carlos Figueroa Suárez.
El pasado 10 de diciembre la JEP dio a conocer que 22 máximos responsables reconocieron su participación en falsos positivos ocurridos en Norte de Santander y en la costa Caribe: El general (r) Paulino Coronado, y once oficiales más, seis suboficiales, tres soldados y un tercero civil reconocieron su responsabilidad en el asesinato y desaparición forzada de, al menos, 120 personas en el Catatumbo y 127 en la costa Caribe, que fueron presentadas falsamente como bajas en combate.
El 29 de noviembre pasado, la Sala de Reconocimiento ordenó el traslado del expediente del coronel (r) Publio Hernán Mejía Gutiérrez, imputado por la Jurisdicción dentro del Caso 03 (muertes ilegítimamente presentadas como bajas en combate por agentes del Estado, los llamados falsos positivos), a la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) de la JEP.
La orden de traslado se dio luego de que el excomandante de dicha unidad militar no reconociera su responsabilidad en los hechos que son estudiados en el Caso 03, subcaso costa Cribe, que abarca lo ocurrido entre 2002 y 2005 en el norte de Cesar y sur de La Guajira, atribuido a algunos integrantes del Batallón La Popa cuando se presentaron como resultados operacionales legítimos los asesinatos y desapariciones forzadas de personas señaladas de pertenecer a las guerrillas, en medio de una alianza criminal entre militares y paramilitares.
Mediante el Auto 128, emitido el 7 de julio de 2021, la JEP declaró como máximos responsables a 15 miembros del Ejército (dos tenientes coroneles, tres mayores, un teniente, dos subtenientes, dos sargentos primero, un sargento viceprimero, un cabo tercero y tres soldados profesionales) por su participación determinante en el asesinato de 127 personas en el norte de Cesar y el sur de La Guajira. Uno de esos 15 imputados fue el coronel retirado Publio Hernán Mejía Gutiérrez, a quien se le atribuye responsabilidad en 75 asesinatos cometidos por el Batallón La Popa entre enero de 2002 y diciembre de 2003 cuando él era el comandante de dicha unidad militar.
Paramilitares fusilados que se hacen pasar por guerrilleros, tortura de milicianos de las FARC y operaciones conjuntas entre autodefensas y Ejército son parte de las espeluznantes actuaciones del comandante del Batallón La Popa en complicidad con los militares que está investigando la JEP.