Este lunes la Corte Suprema de Justicia le abrió investigación preliminar al congresista del Pacto Histórico, David Racero, por presuntamente exigirle parte de su salario a varios integrantes de su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) en los últimos años.
En los próximos días se realizará en la Sala de Instrucción del alto tribunal el reparto de magistrado para que defina la recolección de pruebas con el fin de determinar si existen o no méritos para abrirle una investigación formal al congresista del Pacto Histórico.
Por estos mismos hechos, este lunes la Procuraduría General también anunció la apertura de una investigación preliminar contra Racero.
“La Procuraduría General de la Nación, en virtud de los informes de medios de comunicación sobre posibles conductas disciplinables del representante David Racero, relacionadas con posiblemente haber pedido dinero sus funcionarios de la UTL, acaba de abrir en la Sala de Instrucción, indagación preliminar a fin de verificar la certeza de los hechos denunciados”, explicó por medio de un video la procuradora General, Margarita Cabello Blanco.
La jefa del Ministerio Público aseguró que se buscará establecer si los señalamientos contra Racero “son verídicos”, hecho por el cual se revisará “la certeza y la autenticidad de las pruebas” que existan contra el congresista.
Racero, según obra en varios chats, le habría pedido a su asesora Estefanía Montoya pagar a otro asesor, Yidis Gahona, la suma $ 3′500.000, de un total de $ 8′158.000. Además de cubrir una deuda de 2.375.000 pesos de una tarjeta de crédito que estaba a su nombre.
Como si fuera poco, durante la cuarentena les habría dado otras funciones muy alejadas a las que se realizaban en la UTL, entre estas atender un establecimiento de venta de frutas y verduras.
Tras conocer los señalamientos, el congresista aseguró que él mismo iba a pedir que se le investigara por estos señalamientos.
Este lunes, por medio de su cuenta de X, Estefanía Montoya Domínguez —quien hizo parte de la UTL de Racero y actualmente trabaja en la Agencia Nacional de Tierras (ANT)— negó haber recibido exigencias para que entregara parte de su salario.
“Nunca y enfatizo, nunca, durante los períodos en que trabajé en la Unidad de Trabajo Legislativo de David, hubo una conducta indebida, ninguna exigencia monetaria, ningún tipo de constreñimiento o exigencia”, precisó Montoya en un comunicado en el que indica que conoce desde hace 15 años al representante a la Cámara.
De esta forma, indica que los pantallazos publicados en una columna de opinión, en los que supuestamente se fijaba la entrega de un dinero, fueron sacados de contexto, pues jamás recibió presión alguna.
“Entre nosotros y atendiendo a cuestiones privadas del ámbito de la amistad, hubo ocasiones en las cuales nos prestábamos dinero a nuestra manera temporal, tanto él a mí como yo a él, como alcanza a evidenciarse en los chats interceptados que fueron publicados”, agregó.
Finalmente, considera que la filtración de estos chats lo único que busca es desestabilizar el “proyecto político” que apoyan, afectando de paso el buen nombre del congresista.
“Espero que toda la información tenga la oportunidad de ser aclarada, y que el país tenga la oportunidad de conocer la verdad lejos de intencionalidades políticas o de la intención de dañar a las personas”, señala la exasesora.