La Corte Suprema de Justicia decidió dejar en firme la sentencia condenatoria contra los hermanos Vives Lacouture. En 2017 dos de los hermanos de la influyente familia de Magdalena fueron condenados por el Juzgado 13 penal del Circuito de Bogotá, a una pena de 12 años de prisión. El caso luego fue al Tribunal Superior de Bogotá donde se confirmó la sentencia en 2017. Tras eso, la última opción jurídica que les quedaba a los hermanos era que el máximo tribunal en casación revisara el veredicto. Pero los magistrados acaban de cerrar esa puerta. "Resuelve: no casar la sentencia condenatoria proferida por el Tribunal Superior de Bogotá el 14 de diciembre de 2017", concluye la decisión de la Corte Suprema de Justicia. La Fiscalía logró demostrar la responsabilidad de ambos Vives Lacouture en los delitos de peculado por apropiación a favor de terceros y falsedad en documento privado."Se demostró que los dos procesados recibieron subsidios por un valor de 4.000 millones de pesos, para ello alteraron documentación sobre los predios que no cumplian con los requisitos exigidos por el Ministerio de Agricultura y así se apropiaron de manera ilegal de dineros del Estado", señaló la sentencia del juez. Los dos condenados pertenecen a una de las familias más influyentes del departamento de Magdalena, que también ha sido protagonista de escándalos como el de la parapolítica. Fue en ese macabro capítulo de la historia reciente donde resultó envuelto el exsenador Luis Eduardo Vives Lacouture, primo hermano de los hoy condenados. Inés Margarita y José Francisco Vives Lacouture son nietos de José Benito Vives D’Andreis, un jefe liberal que durante muchos años ejerció enorme influencia y poder como gobernador de Magdalena. Fue senador y dirigente gremial gracias a sus inversiones en la zona bananera, donde adquirió algunas de las fincas que durante años explotó la United Fruit Company. Inicialmente habían sido vinculados al proceso diez miembros de las familias Vives Lacouture, entre otros Álvaro Luis, Roberto Eusebio, Patricia, María Teresa, María Luisa Zuñiva Vives, Silvia Rosa Vives de Sánchez y Silvia Rosa Campo Vives, pero aceptaron devolver 4.500 millones de pesos con intereses y fueron desvinculados de la investigación. Pero Inés Margarita y José Francisco consideraron que no habían cometido ninguna irregularidad y que habían invertido los subsidios en planes de riego para aumentar la producción en sus fincas palmicultoras. Los Vives Lacouture son propietarios de varias haciendas registradas por las sociedades Santa Inés, C. I. Palomino y La Almaja, entre otras, dueñas de las haciendas Santa Inés y La Margarita, donde se habrían fraccionado los predios para recibir los millonarios subsidios. Los Vives Lacouture no son las únicas familias de Magdalena involucradas en este interminable proceso que comenzó en 2008, tras una publicación de la desaparecida revista Cambio que reveló los hechos que este lunes terminan con esta condena. Los alcances de este proceso fueron tran grandes que la misma Corte Suprema condenó al entonces ministro de Agricultura, Andrés Felipe Arias, y a su viceministro Juan Camilo Salazar Rueda. El exministro luchó a nivel nacional e internacional pero resultó derrotado y hace poco más de un mes fue extraditado por Estados Unidos y desde entonces está en una casa militar dentro del Cantón Norte, pagando la sentencia a 17 años que le impusieron.