Desde que se conoció el perfil de los candidatos presentados por el presidente Iván Duque para convertirse en fiscal ‘ad hoc‘, se supo que en la cancha del alto tribunal habían puesto una verdadera prueba de fuego. Este jueves, cuando los magistrados integrantes de la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia se encuentren –por última vez este año– para tratar de desatar el nudo de quién se encargará de tres líneas de investigación del caso Odebrecht, se enfrentarán a un auténtico laberinto de objeciones frente a cada uno de los nombres propuestos por Duque. Las posibilidades de que la corte devuelva la terna son altas. Como se sabe los nombres que fueron postulados por el gobierno son: Margarita Cabello Blanco, actual magistrada de la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia, Clara María González, secretaria jurídica de la Casa de Nariño, y Leonardo Espinosa, decano de la facultad de derecho de la Universidad Sergio Arboleda. Y sobre cada uno hay reservas o bien de tipo legal o de carácter ideológico. Reparos que apuntan a que ninguno podrían encarnar una autonomía plena que es la esencia de lo se busca con el fiscal ‘ad hoc’, dado el conflicto de interés que el caso reviste con relación al fiscal general Néstor Humberto Martínez y su coequipera la vice fiscal María Paulina Riveros, quienes tuvieron que manifestar impedimento y apartarse del asunto. Le recomendamos: El ADN uribista de la terna para fiscal ad hoc Para empezar, las dos mujeres ternadas, Cabello y González, son funcionarias públicas y la ley prohíbe que alguien pueda devengar honorarios de dos cargos oficiales. González no se ha pronunciado, así que no se sabe si ella, en caso de ser electa, renunciaría al cargo de secretaria jurídica en la Casa de Nariño. La magistrada Cabello sí se refirió al asunto. En varias entrevistas radiales dijo que con su equipo estudió el tema llegando a la conclusión de que la responsabilidad de ser fiscal ‘ad hoc’ sería una misión ad honorem, es decir, sin salario y que tampoco implicaría tener que renunciar: “No creo que deba renunciar a la Corte Suprema para ser fiscal ‘ad hoc’”, aseguró. La discusión está abierta. Realmente sobre la figura del fiscal ‘ad hoc’ tal como se explora en este momento no existe normatividad. La ley señala que cuando se haya fundada alguna causal de impedimento frente al fiscal general asume como fiscal ‘ad hoc’ quien ejerza el vicefiscal, pero en esta coyuntura esa opción no es viable pues esta también Riveros se declaró impedida. Es por eso que la Corte Suprema dio luz verde a la opción de que el gobierno formule una terna para de esta elegir a un fiscal ‘ad hoc’ totalmente autónomo. Inicialmente el fiscal elegido deberá asumir tres expedientes de Odebrecht, pero está cantado que sobre este recaerán muchos más pues el escándalo tiene 16 líneas de investigación y los implicados seguramente también acusarán impedimentos de parte de la actual cúpula de la fiscalía general. Por poner solo un ejemplo: el caso del exdirector de la ANI, Luis Fernando Andrade, a quien el fiscal general señaló de ser jefe de complot internacional en su contra. Andrade insiste en que no tiene garantías en esta Fiscalía. Sería lógico que agotado el trámite de recusación ese caso pase a manos del fiscal ‘ad hoc’. Y solo el expediente de Andrade, en lo que va, implica miles de folios y centenares de pruebas. Por todo ello es poco probable que la misión del fiscal ‘ad hoc’ sea una tarea de medio tiempo. Seguramente exigirá full time y así mismo tendrá la respectiva remuneración. En esa medida el análisis de la magistrada Cabello parece desmoronarse. Pero hay un argumento mucho más poderoso que haría inviable la nominación de Cabello. La Corte ha interpretado que el fiscal ‘ad hoc’ debe cumplir los mismos requisitos que se exigen para ser fiscal general (por eso ha solicitado terna al Presidente, tal como ocurre cuando se va a escoger a quien será la cabeza del ente investigador). La ley prohíbe que un magistrado pueda pasar de un día para otro a ser fiscal general, deben trascurrir mínimo dos años. Esa circunstancia anularía la opción de la magistrada Cabello. Puede interesarle: ¿Cuál de los ternados para fiscal ‘ad hoc’ lleva la ventaja? Y hay una objeción adicional. Cabello, como integrante de la Sala Plena de la Corte Suprema, ha participado en la elección de más de una decena de magistrados que han llegado al alto tribunal, los mismos que están llamados a votar para elegir un nombre de la terna para fiscal ‘ad hoc’. Quienes fueron elegidos magistrados cuando Cabello ya tenía silla en la Sala Plena deberán declararse impedidos y ello llevaría a considerar el escenario de conjueces que los remplacen para dicha tarea… Algo que dispendioso y que va contracorriente de la urgencia institucional de hallar un fiscal ‘ad hoc’. Por todos los reparos legales –para algunos magistrados, reparos insalvables– en torno al nombre de Margarita Cabello, un sector de la Sala Plena de la Corte que considera que no se está ante una terna sino ante una dupla de nombres: el de González y Espinosa. Y bajo esa consideración se analiza la posibilidad de devolver la terna para que esta sea reformulada por el gobierno. De otra parte, no son pocos los cuestionamientos respecto a la postulación de González y Espinosa. Sobre la actual secretaria jurídica se critica precisamente que ocupe esa posición. Y ya sea que prospere la tesis de que el fiscal ‘ad hoc’ se asimila al fiscal general, o bien que se asimila a un conjuez, parece imposible que González pueda ser electa sin que renuncie al cargo que ocupa. Le sugerimos: Duque presentó terna para elegir fiscal ‘ad hoc‘ en el caso Odebrecht Efectivamente la ley estatutaria de Administración de Justicia, en el artículo 61, señala que “Serán designados conjueces, de acuerdo con las leyes procesales y los reglamentos de las corporaciones judiciales, las personas que reúnan los requisitos para desempeñar los cargos en propiedad, las cuales en todo caso no podrán ser miembros de las corporaciones públicas, empleados o trabajadores de ninguna entidad que cumplan funciones públicas durante el período de sus funciones. Sus servicios serán remunerados”. También frente a la postulación de González se cuestiona su cercanía estrecha a Duque –se trata nada menos que la secretaría jurídica del Presidente–, toda vez que él aparece salpicado en el escándalo Odebrecht por cuenta de un viaje a Brasil que realizó con el candidato uribista Óscar Iván Zuluaga para escuchar al publicista Duda Mendoza de quien luego se supo era fletado por la multinacional. Y respecto al decano Espinosa, además de cuestionarse su cercanía con el uribismo, se ha conocido que también guarda una relación estrecha con el fiscal general Néstor Humberto Martínez en el ámbito académico donde han compartido cátedra y son coautores de un libro. Puede interesarle: Directivos de Obdebrecht se quedaron esperando para hablar en audiencia contra expresidente de Corficolombiana En el fondo se trata de la fuerte presencia de ADN uribista en la terna formulada por Duque. Un rasgo del que no escapa ni la magistrada Cabello Blanco pues esta fue ternada para fiscal general por Álvaro Uribe años atrás e hizo parte la procuraduría de Alejandro Ordóñez Maldonado en el cargo de delegada para la vigilancia disciplinaria. Así las cosas, se anticipa una dura discusión entre los magistrados de la Sala Plena cuando se encuentren para analizar la cuestionada terna. El presidente de la Corte Suprema de Justicia, José Luis Barceló, explicó que los nominados para fiscal ‘ad hoc’ podrán presentarse por espacio de 15 minutos ante la Sala Plena. Análisis: Libre pero señalado por el fiscal de ser un "conspirador": así es el complejo caso de Andrade Tras esto arrancará la discusión a puerta cerrada y la eventual votación. Lo ideal es que en su última sala de este año la corporación logre elegir al fiscal ad hoc, pero para ello se requiere que alguno de los nombres postulador logre mínimo 16 votos. Considerando que la Sala Plena, donde tienen cabida 23 magistrados pero tan solo habrán 19 (dos cumplieron periodo, el magistrado Gustavo Malo está apartado del cargo por los líos de corrupción y la nominada magistrada Margarita Cabello obviamente no vota), el panorama no se vislumbra halagüeño para que el país cierre al año con fiscal ‘ad hoc’ elegido.