La Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia acaba aprobar una reforma a su reglamento interno que bien podría llevar el nombre de su protagonista: Gustavo Malo. En vista de la incertidumbre que rodea la situación del magistrado, a quien le fue aprobada una licencia no remunerada de dos meses para que se defienda de los señalamientos en su contra como uno de los miembros del cartel de la toga, tenía con los pelos de punta a los integrantes de esta alta corte.La licencia se cumple el primero de diciembre, por lo que sus colegas decidieron anticiparse y zanjar la incómoda discusión de tenerlo de regreso debatiendo en sala las decisiones más importantes de la justicia.A través de una reforma al reglamento interno de la corte, los magistrados votaron por mayoría que de ahora en adelante, cuando un magistrado esté siendo investigado penalmente y por cuenta de ello se encuentre cuestionada de manera grave su honorabilidad, la corporación con una votación superior a las dos terceras partes podrá decidir su relevo. Los magistrados aclaran que esta reforma es con fines preventivos de garantizar la imparcialidad, la moralidad y la ética en la función de administrar justicia para salvaguardar la legitimidad y credibilidad de la justicia. Con esta medida, la corte endurece sustancialmente sus controles internos sobre la continuidad de los magistrados ya que estabece que mediante un trámite "breve y sumario" un magistrado pueda ser apartado de sus funciones jurisdiccionales y administrativas por el término que dure la investigación.Según lo establece el nuevo reglamento, la Sala Plena escuchará al implicado y procederá, en la misma sesión, a tomar la decisión administrativa correspondiente contra la cual no procede recurso. Una vez se tome la decisión de relevo temporal de funciones, la Sala Especializada podrá adopar cualquiera de las siguientes medidas: Suspender el reparto de expedientes al despacho del magistrado relevado de sus funciones, reasignar todos los casos que estén a su cargo y encargar funciones a un servidor de la misma corporación por el tiempo que se estime necesario."La tranquilidad que se esta buscando es que no se paralice la Sala Penal en sus funciones y que no se afecte la administración de justicia por el caso especial", indicó el presidente de la Corte Rigoberto Echeverri.La corte aclara que no se trata de una sanción, se trata de medidas preventivas para evitar que la administración de justicia se vea afectada en mayor proporción con escándalos como los que hoy sacuden a la corte. También aclaran que hasta ahora el magistrado Gustavo Malo no ha solicitado la ampliación de su licencia no remunerada, la cual podría ser prorrogada hasta por tres meses más.