Parecía mentira que una organización criminal acudiera a una ridícula, pero efectiva forma de extorsión. Se trata del “tío - tío” una modalidad criminal que incluía una habilidad histriónica de parte de los delincuentes: simular ser el sobrino de la futura víctima de extorsión. La Fiscalía capturó a una de las actrices de esta organización criminal en el Tolima.

La modalidad del “tío - tío” es una vieja, conocida, absurda y lucrativa forma de extorsión. Los delincuentes tienen un libreto y cada integrante asume un papel antes de hacer una llamada a la víctima. Uno actúa como policía o investigador del CTI para advertir a la víctima que acabaron de capturar a su sobrino. Luego, con la magia de la actuación, otro asume el papel más importante: el sobrino.

El actor y delincuente le ruega a su tío por ayuda, advierte que fue capturado, que se lo van a llevar para una estación de policía y para evitarlo los uniformados exigen un pago, un soborno. Así los delincuentes no sólo logran que las víctimas se convenzan de que su familiar está en problemas, sino que entregan el dinero a través de empresas de giros.

La actuación resulta efectiva y tan cercana que las víctimas no dudan, solo se preocupan y hasta ruegan por su falso familiar al otro lado de la línea. Los delincuentes se atreven, incluso, a hacer advertencias, a afanar por el dinero con la amenaza de llevar a la cárcel al sobrino de la víctima.

La banda de extorsionistas tiene información de sobra de las víctimas. Los ubican en bases de datos, hacen el registros y completan el kardex con otras llamadas en las que simulan ser vendedores o agentes comerciales, de allí y con una nueva actuación, obtienen la información necesaria para completar la extorsión.

En las últimas horas la Fiscalía logró la judicialización de una mujer que integró esta organización criminal en el Tolima. Fue la encargada de reclamar los giros que hizo una víctima a quien llamaron y le repitieron el libreto: su sobrino estaba capturado y hasta logró hablar con su falso familiar.

“Los hechos por los cuales está siendo investigada están relacionados con el accionar del grupo de delincuencia organizada Los Corchos, dedicados al delito de extorsión telefónica bajo la modalidad de tío-tío o el falso familiar. Delinquen a nivel nacional y lo hacen vía telefónica y, en la mayoría de los casos, desde diferentes cárceles del país”, dijo la Fiscalía.

Las extorsiones salen desde las cárceles en diferentes partes del país, pero en la calle alguien debe ser responsable de reclamar los giros, esa fue la misión, según la Fiscalía, de Mirley Ramírez Perdomo, de 35 años de edad, la mujer capturada por reclamar los giros producto de la extorsión.

“Al ciudadano le hicieron creer que su sobrino se encontraba en problemas legales y que para remediarlo debía enviar $ 1.000.000. Luego de hacer el giro le exigieron $ 3.000.000 más, por lo cual decidió comunicarse con su familiar para descubrir que se trataba de un engaño”, explicó el ente acusador.

La mujer fue judicializada, aceptó su responsabilidad y hasta prometió indemnizar a las víctimas. A cambio un juez le concedió la detención domiciliaria y hasta un permiso para trabajar.