Un balance de 41.251 inscritos para las 10.000 becas disponibles reportaron la Secretaría de Educación del Distrito y la Agencia Distrital para la Educación Superior, la Ciencia y la Tecnología (Atenea) al cierre de las inscripciones para la cuarta convocatoria del programa ‘Jóvenes a la U’.

El listado con los nombres de las personas beneficiarias del programa que podrán acceder a educación posmedia sin créditos ni endeudamientos se conocerá en la primera semana de enero.

La secretaria de Educación del Distrito, Edna Bonilla, señaló que con estos resultados se supera la meta de 20.000 cupos en todo el cuatrienio del Plan de Desarrollo Distrital, para el acceso a la educación superior en universidades acreditadas en alta calidad, que ofrecen programas de educación altamente demandados por el sector empresarial y productivo de la capital.

El director de la Agencia Atenea, José María Roldán Restrepo, informó que para las personas que resulten beneficiarias, el proceso de formalización de las becas y las matrículas ante las instituciones de educación superior y la Agencia Atenea se llevará a cabo dependiendo del cronograma de cada una de las universidades.

Los beneficiarios recibirán, adicionalmente, un apoyo económico durante cada uno de los semestres de formación equivalente a un salario mínimo legal vigente, con lo que se busca fomentar su permanencia en el programa.

“Hoy no hay excusas para que los jóvenes se queden sin acceso a la educación superior. Con ‘Jóvenes a la U’, les estamos abriendo la oportunidad de estudiar la carrera que quieren, sin pagar un solo peso, sin endeudarse y en la universidad que quieren”, afirmó la secretaria.

De acuerdo con los reportes entregados por Atenea, del total de inscritos, el 56 por ciento son mujeres.

Las cinco localidades con mayor número de inscritos fueron, en su orden: Bosa, Kennedy, Suba, Ciudad Bolívar, Usme y Engativá. Y los programas más demandados fueron ingeniería de sistemas, ingeniería industrial, arquitectura, enfermería, tecnología en desarrollo de software, técnica profesional en medios audiovisuales, medicina veterinaria e ingeniería de software.

Por alerta de crisis en el aprendizaje, Bogotá se comprometió a que los niños aprendan a leer y a escribir a temprana edad

Tras la alerta que hicieron el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Unicef, Usaid y el Ministerio de Educación Nacional sobre la crisis de aprendizaje que se ha profundizado a causa del covid-19, la Secretaría de Educación de Bogotá suscribió un compromiso para que los niños aprendan a leer y a escribir a temprana edad.

Este llamado se realizó en el marco del evento ‘Compromiso de Acción Colombia’. En este espacio se reflexionó sobre los aprendizajes básicos y allí, en cabeza de Mauricio Castillo, subsecretario de Calidad y Pertinencia de la Secretaría de Educación del Distrito, Bogotá firmó este acuerdo y exaltó que esta articulación interinstitucional por la calidad educativa es fundamental para el desarrollo integral desde temprana edad de niñas, niños y jóvenes en el país.

La apuesta de los aprendizajes básicos se orienta a garantizar que niñas y niños aprendan a leer y a escribir en los primeros años escolares; esto significa que desarrollen el lenguaje oral, la conciencia fonológica, el principio alfabético, el vocabulario y la comprensión y producción de palabras, oraciones y textos.

Según las investigaciones de las ciencias de la lectura, estos aprendizajes son las bases de una trayectoria escolar completa y exitosa y contribuyen a disminuir las dificultades académicas de los estudiantes en las demás áreas del conocimiento, y también contribuyen a reducir el porcentaje de repitencia escolar.

Colombia es el primer país de Latinoamérica en adherirse a este compromiso y Bogotá en este escenario ratificó su trabajo para el cierre de brechas de aprendizaje y compartir los logros alcanzados a través del Plan de Fortalecimiento de la Lectoescritura como estrategia para fortalecer las capacidades de maestros y maestras para la transformación de sus prácticas pedagógicas y lograr que niñas y niños en Bogotá aprendan a leer y a escribir en la edad adecuada.

Por medio de este compromiso, el país se compromete a reducir en un 50 % el número de niños y niñas a quienes se les dificulta leer y comprender un texto a la edad de 10 años, para el año 2030. Se trata de un paso fundamental para garantizar que niños y niñas, incluidos los más marginados, adquieran un aprendizaje básico que les permita desarrollar todo su potencial y participar en la sociedad.