Yamid Saldaña Medina, un joven bogotano estudiante de Derecho, estuvo buscando durante mucho tiempo un modelo de tenis de la marca Reebok, que había visto por internet y lo cautivaron.

“Son unas zapatillas Reebok Classic Leather de color blanco. Ya las había visto en la página de la marca, pero no tenían mi talla. El pasado 16 de junio me apareció una publicidad en mis redes sociales, donde se veían los tenis que me habían gustado, por lo cual entré al enlace y para mi sorpresa ya tenían mi número de calzado”, comentó.

Luego de verificar que era la dirección web oficial de Reebok (marca que le pertenece a la gigante alemana Adidas), Yamid escogió el producto y se dispuso a pagarlo por PSE con tarjeta débito. “Me costaron 266.667 pesos, lo que me pareció muy barato, pues estaban con el 50 % de descuento”, recordó.

Estas son las zapatillas Reebok Classic Leather de color blanco, escogidas por el denunciante en la página oficial de la marca en internet, con un costo de 266.667 pesos. | Foto: Revista Semana

Tras finalizar con éxito la transacción, fue remitido a una nueva página dentro de la tienda online, en la cual se le informó que ya había sido aceptada la compra y que a su correo electrónico llegaría una notificación, indicándole cuando llegarían los tenis, además de su factura electrónica.

“Yo suelo hacer compras en línea y por lo general ese tipo de e-mails de confirmación llegan de inmediato, porque son automáticos. Luego de un rato me di cuenta de que no había llegado, por lo cual entré a la página de mi banco, donde verifiqué que la transacción si se había efectuado y sí me descontaron el dinero a nombre de Adidas. Ahí quedé más tranquilo, porque la compra sí se hizo y no fue una página fraudulenta o algo así”, explicó Yamid.

Este es el comprobante de pago de Yamid Saldaña en su banco, en el cual se evidencia la transacción que hizo con Adidas, casa deportiva propietaria de la marca Reebok. | Foto: Revista Semana

El lunes 21 de junio, habiendo pasado una semana desde la compra, Yamid notó con preocupación que no llegaba el dichoso correo ni el producto comprado. Llamó a los números de atención al cliente en la web de Reebok, donde un asesor le indicó que efectivamente se había presentado un problema al momento de tramitar su compra. En otras palabras, recibieron el dinero del joven pero no despacharon el producto.

“Pasó una semana desde esa llamada y nada que me daban una respuesta definitiva, entonces intenté llamar de nuevo, pero la llamada nunca entró. Les escribí por Facebook el 28 de junio a las 10:41 a. m., donde me pusieron a hacer todo el procedimiento de nuevo”, asegura ofuscado.

Extractos de los chats que Yamid Saldaña sostuvo con servicio al cliente de Reebok/Adidas durante 3 semanas, sin lograr solución alguna. | Foto: Revista Semana

Como una suerte de “casualidad inaudita”, Yamid recibió el pasado 15 de julio la misma publicidad que la primera vez lo llevó a hallar sus tenis en la web de Reebok. Con sorpresa encontró que en los comentarios de la publicación había muchas otras quejas de clientes insatisfechos, por casos similares al suyo.

Algunos de los comentarios de usuarios en Facebook contra la compañía deportiva Reebok, perteneciente a la multinacional Adidas. | Foto: Revista Semana

“NO VAYAN A COMPRAR! NOS ESTÁN ROBANDO, NO REGRESAN EL DINERO Y TAMPOCO LLEGAN LOS PEDIDOS”, escribió el usuario Sac Alemán.

“No compren es un fraude!”, denuncia Cendy Díaz. “No recomiendo comprar por la página, llevo más de un mes esperando la entrega del producto o la devolución del dinero, y no dan solución, ya puse denuncia”, explica Sergio sarmiento.

“Son unos ladrones.... Desde el primero de junio y esta es la hora en la que no me han devuelto nada!!!!!!”, asegura Daniel Cárdenas, otro de los internautas presuntamente estafado.

Como estos, la publicación tiene en total 16 comentarios negativos, alusivos a la falta de cumplimiento de Reebok/Adidas para entregar lo comprado y pagado en línea.

Para ese entonces, Yamid ya había elevado un reclamo contra Reebok ante la Superintendencia de Industria y Comercio, buscando que la entidad le ayudara a recibir lo comprado o recuperar su dinero. “Lo hice por la web el 01 de julio”, explica.

La SIC, que tiene como objetivo la vigilancia a los empresarios y la protección del consumidor, citó al afectado y a los representantes de la empresa en Colombia a una conciliación virtual, programada para el próximo 9 de agosto de 2021 a través de la plataforma SIC Facilita.

“Esta página web facilita la comunicación entre consumidores y proveedores, agiliza los procesos, evita llegar a una demanda y así poder conciliar de forma fácil, rápida, con contacto directo entre ellos y mediada por la SuperIndustria”, aclaró Ana María Uribe, jefe de la Oficina de Servicio al Consumidor y al Apoyo Empresarial de la SIC.

SEMANA se puso en contacto con la agencia de comunicaciones y prensa de Reebok en Colombia, la cual indicó que en este momento no existe un vocero autorizado para dar una declaración acerca de estas denuncias.

Casos de incumplimiento en la web se multiplicaron desde la pandemia, asegura la SIC

Según datos de la entidad, la cuarentena obligatoria nacional, vivida entre marzo y septiembre de 2020, trajo consigo un mar de reclamaciones, denuncias y demandas contra empresas colombianas y multinacionales, principalmente por el incumplimiento en la entrega de productos y servicios adquiridos por internet.

“Las denuncias aumentaron en un alarmante 106 %, pasando de 13.925 en 2019 a 28.752 en 2020. Las demandas presentadas ante la Delegatura de Asuntos Jurisdiccionales aumentaron en un 24,5 %”, reveló un comunicado de la Superintendencia de Industria y Comercio.

Al parecer, en 2021, muchas de las empresas se acomodaron al estilo de “venta virtual” y ajustaron sus tiempos de entrega y cumplimiento. “En el primer semestre de 2020, a través de la plataforma de la SIC se recibieron 33.363 reclamaciones. En el mismo periodo de 2021 se recibieron 32.890 reclamaciones. Es decir que se presenta una disminución de 470 reclamaciones de 2021 frente a 2020″.

Al cierre de este artículo, ninguno de los afectados en el escándalo de Reebok ha recibido respuesta alguna por sus elementos comprados o la posible devolución de su dinero.