El próximo 20 de julio Roy Barreras se convertirá en el nuevo presidente del Congreso; eso se traduce en que tendrá en su poder el orden de los proyectos que son prioridad, la facultad sobre las plenarias, entre otras responsabilidades que recaen sobre ese cargo.

En un Estado social de derecho como lo es Colombia, el Congreso generalmente es una rama independiente del poder Ejecutivo, es decir al presidente, pero esta vez, como lo ha evidenciado Barreras, se convertirá en un brazo político en el que durante un año buscarán sacar adelante el mayor número de reformas que necesita Gustavo Petro para cumplir lo que prometió en campaña.

La decisión de que Barreras vaya a ser el próximo presidente del Congreso generó todo un intríngulis en el Pacto Histórico, y las diferencias que venían desde hace tiempo y no pudieron develar en campaña, salieron a flote. Los simpatizantes reclamaron aireados que ese no fue el cambio por el que votaron, y a esas quejas se sumó, como si fuera poco, que varios líderes estallaron contra Roy Barreras, el elegido, y contra María José Pizarro, quien también estaba en la disputa y avaló lo conversado.

Alexander López y Gustavo Bolívar, dos hombres fieles y cercanos a Petro, y que también querían el cargo, reclamaron que esa decisión no reflejaba ningún cambio y que se pasaron por la faja a los demás aspirantes. “No digas mentiras”, “no estuvimos de acuerdo”, “no representa el cambio”, “esperaba más de usted”, fueron algunas de las críticas sobre Pizarro y Barreras.

Una de las grandes razones por la que se generó la tormenta sobre Barreras, es por su amplia trayectoria en diversas colectividades, todas llenas de polémicas. Recientemente, el senador ha estado en el ojo del huracán por su gestión, sus palabras pasadas de tono y sus acciones.

Roy uribista

Roy Barreras fue uno de los principales defensores de Álvaro Uribe en sus dos periodos como presidente, incluso en algún momento lo comparó con el libertador Simón Bolívar. “Tengo y seguiré teniendo la más grande admiración por el presidente Uribe, a quien creo de la talla histórica de Bolívar. Y voy a seguir defendiendo su obra de gobierno”, señaló en una entrevista a SEMANA en el 2012, cuando ya respaldaba a Juan Manuel Santos, quien había traicionado a Uribe y a quien se le cuestionaba por ese hecho.

Fue tal la admiración y cercanía con Uribe que en 2009 Barreras nombró al expresidente como padrino de uno de sus hijos, hecho que se concibió en la capilla del Palacio de Nariño. Barreras y Uribe son compadres.

El senador no solo invitó a Uribe a ser parte de su familia, sino que también fue clave desde el Congreso para sacar adelante todas las políticas del legado de la seguridad democrática del expresidente, esa que tanto critican los petristas y por la que se rasgan las vestiduras, entre ellas la Ley de Justicia y Paz, tan cuestionada por los seguidores del Pacto Histórico.

En ese momento, como lo hará ahora, no solo apoyó los proyectos del gobierno de Uribe, sino que ayudó a concertar con otros partidos para lograr las mayorías, una tarea que ahora repetirá, pero desde una orilla ideológica distinta.

Su relación con el uribismo terminó cuando se pasó al santismo y decidió, al igual que el expresidente, darle la espalda a quien le ayudó a llegar al poder. En esa ocasión también le llovieron críticas a Barreras por dar el salto al lado ganador.

El distanciamiento entre Uribe y Santos también fue el de Uribe y Roy.

Roy santista

En los dos periodos de Juan Manuel Santos, Barreras logró consolidar su carrera política. Es tanto el aprecio y legado que mantiene por el expresidente que es de los pocos que sigue defendiendo con fervor el acuerdo de paz de La Habana y al expresidente.

En realidad la carrera política de Barreras inició de la mano de Germán Vargas Lleras por Cambio Radical en 2006, cuando fue elegido representante a la Cámara por ese partido. Posteriormente, fue expulsado y aterrizó en el Partido de la U que había sido creado por Uribe, pero que luego se volcó completamente a Juan Manuel Santos.

Desde el 2010 fue elegido senador por esa colectividad y fue tal su protagonismo que en 2014 fue nombrado presidente de La U, un reconocimiento hecho desde el Gobierno por su fidelidad con el acuerdo de paz que se negociaba en La Habana y por lograr las reformas necesarias en el Congreso para que ese proceso se diera como sucedió, a pesar de las críticas y reproches de un gran sector de la sociedad y de que el ‘no’ ganó el plebiscito. Barreras también fue clave en las negociaciones en Cuba y se le vio en varias ocasiones en la isla concertando con los guerrilleros. Desde entonces carga en su traje el pin de la paloma blanca de la paz.

Barreras fue presidente del Senado en la legislatura 2012-2013, por lo que es un campo y un cargo que conoce como pocos. Esa pudo haber sido una de las razones de fondo para escogerlo esta vez entre el petrismo, con el aval del nuevo mandatario, Gustavo Petro.

Además de sacar adelante varias de las reformas de Santos en ese periodo, también se destacó como congresista por ser el autor de la aprobación de la Ley de Víctimas, la presentación y la ley del Marco para la paz, la apertura de las 19 mesas regionales de paz, las 16 curules para las víctimas, recoger más de 3.000 propuestas de La Habana, entre otros proyectos importantes para que Santos firmara el acuerdo con los exguerrilleros de las Farc.

Tras la salida de Santos del poder, uno de los pocos que ha continuado hablando de lo que hizo el expresidente en el poder, ha sido Barreras, un tema inconcluso y desgastado que ha dejado más críticas que certezas. De hecho, Petro en un momento de la campaña le sugirió que era un tema pasado de moda y que había que “poner la palomita en otro lado”, alejada del logo del Pacto.

En el 2019 se anotó uno de sus mayores triunfos políticos y por el que aún se ufana, y es que logró, como pocos, tumbar a un ministro, Guillermo Botero, quien entonces manejaba la cartera de Defensa de Iván Duque. Lo consiguió tras revelar que en un operativo del Ejército en San Vicente del Caguán fallecieron ocho menores de edad. La moción de censura no se llevó a cabo, pero el exministro tuvo que dar un paso al costado.

Roy Barreras fue clave en el gobierno de Santos para sacar adelante reformas del acuerdo de paz.

Roy petrista

Un hecho que nadie hubiera previsto es que Barreras terminara en el sector totalmente opuesto al que inició su carrera política. Desde el Partido de la U fue desmarcándose y acercándose a las ideas de Gustavo Petro, quien llevaba haciendo campaña desde hace varios años. A eso se le suma las peleas que empezó a cazar con el uribismo por defender el acuerdo de paz con las Farc.

En octubre de 2020 decidió renunciar a La U y llegar a las toldas de Petro. Posteriormente, dijo que se lanzaría como candidato independiente y que no volvería al Congreso. Logró recolectar las firmas pero a pocos meses de que se realizara la consulta interpartidista decidió retirarse para acompañar a Petro, un propósito que siempre tuvo claro, como evidenció en las conversaciones que se conocieron en los ‘petrovideos’ en los que reconoció que su candidatura solo estaba ahí para ayudar a que Petro llegara al poder.

Precisamente, en los archivos conocidos por SEMANA, Barreras fue uno de los que más quedó en el ojo del huracán. Allí se evidenció la campaña sucia que se orquestó y en la que fue uno de los protagonistas.

Más allá de las críticas pasadas de tono a otros adversarios políticos y lo cuestionable de su discurso, uno de los temas que más generó polémica fue cuando reconoció que sabían de la visita de líderes del Pacto a las cárceles a ofrecer el perdón social y que por eso había que adelantarse a la tormenta que se iba a generar.

“Hay visitas a las cárceles al pabellón de extraditables de dirigentes del Pacto Histórico ofreciendo la no extradición a los extraditables”, reconoce en una de las grabaciones. Además, habló de recibir ayuda financiera de Supergiros, un plan contra el sistema financiero, entre otros hechos cuestionables.

Además de la gigantesca polémica que generaron los ‘petrovideos’, ese no ha sido el único cuestionamiento que Barreras ha tenido que sortear desde el Pacto. También es recordado el maletín con una gran suma de dinero en efectivo que dejó abandonado en un hotel de la capital, a unas cuadras del Capitolio.

Barreras ha pasado por todos los sectores políticos pero en ninguno había tenido tantas polémicas como ahora. Sin duda es un líder que el petrismo se ha tenido que aguantar por llegar al poder.

El senador es hábil en concertar y acercar a otros sectores, como quedó evidenciado en la campaña, siendo jefe de debate parlamentario de Petro.

Varios han tenido que aguantar las fuertes críticas o insultos que ha enfrentado con varios del Pacto. Uno de los que más se ha peleado con Barreras es Gustavo Bolívar, quien en varias ocasiones le ha reclamado. También ha tenido disputas con Armando Benedetti, entre otros.

En los ‘petrovideos’ se evidenció el trato hacia Alejandro Gaviria, a quien se refería como el “enemigo” y al que estuvo dispuesto a atacar a toda costa con tal de afectar su candidatura. Lo mismo sucedió con Sergio Fajardo.

Roy Barreras es caleño, médico de profesión, ejerció durante casi 20 años como profesional de la salud pero luego se pasó a la política. Ha sido taxista, panadero y hasta enfermero. Incluso, llegó a escribir un libro de poemas.

Al estar en el Pacto Histórico logró acercar personas de su círculo político y familiar. Una de ellas es Gloria Arizabaleta, exesposa del senador y quien será representante del Pacto por el Valle. Otra fue Sandra Villadiego, que venía de La U, y que tuvo que salir luego de que generara una gran polémica por ser esposa de Miguel Ángel Rangel, condenado por parapolítica.

La vida política de Roy Barreras ha estado llena de cuestionamientos y saltos de un sector a otro.

Con su nuevo rol en el Congreso, que asumirá en unas semanas, Barreras ha confirmado que volverá a agrupar a los partidos políticos alrededor de las propuestas de Petro para sacar adelante las reformas que se necesita el nuevo gobierno para cumplir lo que prometió. Buscarán lo que han denominado el “acuerdo nacional”, y en eso, Barreras será el comandante, un experto de mil batallas.