“La consigna es la misma: no son vacaciones. Estamos en el pico de la pandemia en Bogotá, en los días y semanas más críticos, lo cual genera una repercusión en Cundinamarca y por eso también son los días en los que debemos cuidarnos más”, señaló Nicolás García, gobernador del departamento. Pese a este mensaje de advertencia, algunos viajeros trataron de evadir el ‘Plan candado‘ que instauró Cundinamarca en sus 116 municipios, con ocasión del puente festivo por la Batalla de Boyacá. La medida rige desde el miércoles 5 de agosto, a las 11:59 p. m., hasta el lunes 10 de agosto a la misma hora, y por esta razón algunos infractores se apresuraron a salir, principalmente desde Bogotá, para tratar de llegar a destinos turísticos.
Aunque la prohibición de ingreso al departamento se aplicó durante los festivos del mes de julio, parte de la ciudadanía sigue empecinada en salir de paseo aun cuando el pico de la pandemia en la región está llegando a su punto más alto. Durante el operativo de vigilancia y control que ha hecho la Secretaría de Movilidad de Cundinamarca y la Policía, se produjo la inmovilización de 88 vehículos, 95 comparendos y 515 automóviles fueron devueltos para evitar su ingreso.
Dentro de las excepciones a la regla se encuentran únicamente los vehículos destinados a la movilización de víveres o productos de primera necesidad, empresas de transporte intermunicipal que han comenzado a funcionar en puntos de baja afectación de la covid-19 y demás automóviles que cuenten con la autorización expresa para recorrer las vías de Cundinamarca como parte de sus labores productivas.