El Pacto Histórico se encuentra en crisis y podría ver salir a una de sus principales figuras: Francia Márquez, candidata presidencial por el Polo Democrático. La lideresa, quien recientemente reveló que fue defraudada por quienes toman las decisiones en la coalición de izquierda. Soy porque somos, el movimiento al que representa la aspirante, no logró las principales casillas de la lista al Senado. Esto causó dos renuncias y un descontento hacia Gustavo Petro que se viralizó en redes sociales.
La lista de defraudados de parte del llamado colegio electoral del Pacto Histórico es amplia y uno de los principales voceros del descontento es el representante César Pachón, quien reprochó la falta de protagonismo de los campesinos en los primeros renglones. El congresista por Boyacá le contó a SEMANA sobre los procesos internos, los roles de algunos líderes y la realidad de la representación del agro en la lista.
SEMANA: se sabe que el colegio electoral está desdibujado y no es lo que se planteó en primer lugar. ¿Qué pasó ahí?
César Pachón (C. P.): primero estaban los sectores sociales, los partidos y demás. No había forma de tomar decisiones y teníamos que decidir si las listas eran abiertas o cerradas. Entonces, el senador Roy [Barreras] propuso un colegio electoral. Los miembros éramos precandidatos presidenciales, representantes legales de las personerías jurídicas y congresistas de Cámara y Senado. También, algunos pocos del sector social que estaban representados en las candidaturas presidenciales. Esto sirvió para poder tomar la decisión de las listas y a partir de esa reunión –que fue a mitad de año– no nos volvieron a citar.
Esta decisión de las listas y su orden no la tomó el colegio electoral. Si el Pacto Histórico dice que la tomó, es mentira. Esta decisión la tomaron unos pocos. Algunos representantes legales de los partidos y algunos precandidatos, no todos. Si hubiese estado Francia Márquez, no hubiese pasado esto.
SEMANA: ¿se sabe quiénes son los que tomaron la decisión por encima del anterior colegio electoral?
C. P.: el Polo Democrático estuvo ahí sentado, el senador Roy Barreras como precandidato presidencial también. La presidenta del Mais, Martha Peralta, también. No sé quiénes más, pero fueron muy pocos los que consolidaron las listas y no fue el colegio electoral. Nosotros, con credencial, no tuvimos acceso a ningún debate de la posición de las listas de Cámara y Senado. Me parece una burla total hacia nosotros porque había acuerdos y un colegio electoral al que no se citó. Nos pasaron por encima a todos.
SEMANA: usted tiene casi 30.000 votos en Boyacá y pudo haber apalancado la lista. ¿Por qué lo dejaron en la casilla 17?
C. P.: esa lista no es de renovación ni de juventud. Cuando se saca el promedio de edades de las personas que están en los diez primeros lugares, da más de 53 años. Ahí acomodaron conveniencias políticas y acuerdos políticos. En un momento, se habló del Pacto Histórico como representantes de sectores marginados del país. Por ejemplo, el campesinado, para votar por el Pacto Histórico, quiere ver si sus líderes están bien ubicados y tienen opciones de llegar. Así como están las condiciones, los dinosaurios de izquierda colombiana tradicional nos sacaron y no estamos posicionados para ocupar un lugar de los elegibles al Senado.
SEMANA: ¿quiénes son los dinosaurios?
C. P.: la candidata de Francia Márquez no entró porque los lugares de las mujeres los ocuparon Clara López, Piedad Córdoba y hasta la misma Gloria Flórez. Si Roy Barreras y Gustavo Bolívar dicen que vamos a sacar 30 o 40 senadores, pues que se pongan en el lugar en el que nosotros estamos. Ellos alguna vez dijeron que iban a ocupar el renglón 20, pero ahora quieren el número uno de la lista. Si dicen que tengamos tranquilidad y seguridad, que se hagan en el puesto de nosotros.
SEMANA: ¿cómo vio el llamado conejo que le hicieron a Francia Márquez?
C. P.: en un principio se habló de que, después de cinco personerías jurídicas, venía un espacio étnico y otro de un grupo social. En mi caso, el de los campesinos, y entre los étnicos los afro y los indígenas. Ese sistema no se respetó. Cuando tú miras la lista, va uno tras de otro. Gente sin credencial a la que le ponen por encima a uno. Yo no le echaría la culpa a Gustavo Petro porque no estuvo en las reuniones finales del Pacto. Estuvieron los que yo te decía, algunos representantes de partidos y precandidatos. No sé ahí qué pasaría internamente o [cuál fue] el acuerdo.
Finalmente, no pudieron mover los lugares de la lista porque necesitaban la firma de cada uno de nosotros, quienes ya estábamos inscritos, para movernos voluntariamente. Esto, sin ninguna garantía de que se organizara una lista que representara lo social, no los dinosaurios de la izquierda del país. ¿Qué sucedió? Trataron de movernos y no nos dijeron la verdad del porqué de la firma en la Registraduría. Nos trataron de llevar con engaños para firmar. Nunca me quisieron decir cuál era el fin. Se hizo al acomodo de los aliados políticos.
SEMANA: entonces Petro no es el responsable...
C. P.: a Petro le llegan muchos problemas, tiene muchas cosas todos los días. Él solo no puede llevar la responsabilidad, somos un pacto. Somos diferentes fuerzas sociales y políticas y no podemos recargar ese problema o acusación en Petro. Él va a ser el presidente de este país. Lo que queremos es un Congreso que represente al pueblo colombiano.
SEMANA: en su opinión, ¿cómo quedó parado el campesinado?
C. P.: entre los primeros 30 lugares, pero sin opciones de quedar. Estamos tres personas que trabajamos en el sector agropecuario, pero quedamos muy retirados y sin opciones de quedar electos. Nosotros siempre aportaremos y no importaría el lugar donde nos dejaran si hubiera seriedad para honrar los compromisos.
SEMANA: Sandra Villadiego sigue como candidata a la Cámara de Representantes. ¿Cómo cayó eso en los sectores críticos de las listas?
C. P.: tal y como pasó en la lista al Senado, ocurrió en muchas otras listas a la Cámara. Inconformismos existen en Boyacá, en Santander, que finalmente no salió adelante. Listas de departamentos que tuvieron muchos problemas. Este tema de la señora está comprobado, al igual que los procesos de su esposo. No tiene razón de estar en la lista, hay muchas más candidatas que pueden representar al departamento. Debería dar un paso al costado y permitir que otra mujer participe.
SEMANA: ¿cómo piensan tener cohesión con una bancada tan contradictora?
C. P.: en este momento de crisis, los sectores no somos capaces de sentarnos a reconocer errores y problemas para respetar las representaciones. No va a ser posible construir unos lineamientos y reformas puntuales. Es el momento en el que el Pacto Histórico debe reunirse y sentarse para consolidar la fuerza de la posible bancada. Si en este momento no convocan a la gente, se deja por fuera a los candidatos que consideran que no tienen opción, entonces no tenemos nada. No hay bancada unida. Es el momento de reconocer errores.