Si bien este jueves Cuba y Noruega, países garantes en el proceso de paz entre el Gobierno y las FARC, anunciaron que quedaba superado el impasse por la visita de delegados del esa guerrilla en el corregimiento de Conejo (Fonseca, La Guajira) acompañados de decenas de hombres armados en medio de la población civil, los ecos de esa acción continúan.El que debía ser un acto de pedagogía de la paz de algunos jefes de las FARC para sus hombres terminó por ser un acto de proselitismo político, según denunció el Gobierno, en el que “se rompieron las reglas”, tal como lo señaló el jefe negociador oficial, Humberto de la Calle.Los críticos del proceso de paz inmediatamente reaccionaron y se pronunciaron ante el hecho. Uno de ellos fue el procurador Ordóñez, quien afirmó que el hecho era un desafío a la institucionalidad, auspiciado por el Gobierno.Pero este miércoles se conoció que la situación podría ser más seria de lo que se pensó. La Defensoría del Pueblo denunció que la guerrilla cometió una infracción al Derecho Internacional Humanitario por haber ocupado un colegio de ese corregimiento para el acto de proselitismo.El organismo aseguró que "pudo comprobar que dentro y fuera del establecimiento educativo hubo personas fuertemente armadas, las cuales acompañaban a los delegados, que encabezados por ‘Iván Márquez’ instruyeron a la población civil y distribuyeron propaganda política alusiva a su visión sobre el proceso de paz".Según la Defensoría, las instalaciones del colegio fueron solicitadas para llevar a cabo un evento cultural, pero luego de establecer que allí hubo presencia armada de las FARC y guerrilleros, portando fusiles de asalto y abundante munición, recorrieron los espacios habitualmente ocupados por menores de edad.Allí, dice el organismo, hubo una clara "infracción a las normas internacionales de los derechos humanos y una violación a los derechos superiores de niños, niñas y adolescentes, quienes gozan de especial protección constitucional".Por esta razón la Defensoría decidió denunciar los hechos ante el jefe negociador del Gobierno Humberto de la Calle y el saliente coordinador residente del Sistema de las Naciones Unidas en Colombia, Fabrizio Hochschild.En la tarde de este miércoles los jefes de las FARC viajaron de regreso a Cuba, en donde retomarán conversaciones con el Gobierno en los próximos días. Ahora, está de por medio no sólo la incomodidad que generó su visita a La Guajira, sino esta grave denuncia de la Defensoría del Pueblo.