Alrededor de 17 comunidades indígenas resultaron afectadas por los combates que se han estado presentando entre las guerrillas del ELN y las llamadas autodefensas gaitanistas. De acuerdo con un informe presentado este lunes por la Defensoría del Pueblo, cerca de 2.500 indígenas abandonaron sus resguardos. En el comunicado emitido por la institución se denuncia el desplazamiento masivo que se viene presentando en el departamento de Chocó, en esta ocasión por los enfrentamientos entre grupos armados ilegales en zona rural del Alto Baudó, donde 2.500 integrantes de 17 comunidades indígenas ubicadas en las riberas del río Dubaza, abandonaron sus lugares de origen. Se trata de los resguardos Dopare, Soquerre, Piedra Mua, Corodó, Jangadó, Dupurdu, Punto Viejo, Docacina, Pueblo Nuevo, Coñadó, Esevede, Playa Grande, Andeudó Carrisal, Loma y Villa Miriam Siorodó, los cuales quedaron en medio del fuego cruzado entre guerrilleros del frente Resistencia Cimarrón del ELN y miembros de las llamadas Autodefensas Gaitanistas, que a juicio de las autoridades corresponde a una facción del hoy denominado clan Úsuga. Según el reporte, desde finales del 2013 se han registrado enfrentamientos armados con incidencia sobre seis grupos poblacionales de afrocolombianos, pertenecientes al Consejo Comunitario General del río Baudó y sus afluentes. Incluso, el avance de los llamados ‘Gaitanistas’ hacia el territorio indígena amenaza con extenderse a otras ocho comunidades asentadas en la cuenca del Bajo Baudó, donde desde el año 2011 se han presentado tres desplazamientos masivo.