Una delicada situación de orden público se vive en el municipio de Tuluá, Valle del Cauca, luego de que este sábado, 10 de febrero, fueran atacados por sicarios, en casos aislados, dos agentes de Tránsito de este municipio, uno de los cuales murió y el otro permanece gravemente herido, de acuerdo con la gobernadora Dilian Francisca Toro.

Sumado a lo anterior, conoció SEMANA que al menos seis vehículos fueron incinerados por desconocidos en el transcurso del sábado. Medios regionales reportaron que la incineración de algunos automotores ocurrió en el callejón El Mate del corregimiento de Aguaclara, en el barrio La Esperanza, y en el barrio Nuevo Príncipe.

Las autoridades no descartan que lo anterior sea una retaliación por la captura y traslado a Bogotá de Mauricio Marín Silva, alias Nacho, quien es señalado de ser el jefe de la temida banda delincuencial La Inmaculada, también conocida como La Oficina, que opera en este municipio vallecaucano.

Alias Nacho es hermano de alias Pipe, cabecilla de la estructura criminal, y quien se encuentra recluido en la cárcel La Picota de Bogotá.

Captura de Mauricio Marín Silva, alias Nacho, hermano de alias Pipe. | Foto: Policía

Gustavo Vélez, alcalde de Tuluá, indicó a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter) que los agentes de Tránsito atacados fueron identificados como Jonny Castaño y César Hernández.

“Condeno y lamento profundamente los atentados sicariales contra los agentes de Tránsito de Tuluá Jonny A. Castaño y César Hernández. Solicito a las autoridades investigar estos hechos para dar con los responsables y ofrecer claridad al pueblo tulueño. Seguimos trabajando”, dijo el alcalde local, a través de la citada red social.

SEMANA trató de contactar telefónicamente al alcalde Vélez, pero este indicó que por el momento no iba a entregar declaraciones. Por el contrario, manifestó vía WhatsApp que “primero estamos esperando la reacción de las autoridades”.

En medio del operativo de las autoridades para retomar el control de Tuluá, el alcalde Vélez confirmó que el municipio permanecerá militarizado, con toque de queda y restricción a parrillero hombre.

“De manera coordinada con la gobernadora Dilian Francisca Toro, hemos tomado la decisión de militarizar Tuluá y decretar el toque de queda desde las 11:00 de la noche de hoy (sábado). También habrá restricción de parrillero durante todo el fin de semana. Necesitamos el apoyo de los tulueños”, anunció el mandatario local por X.

De igual forma, el Ministerio de Defensa anunció que 120 hombres de la Tercera Brigada del Ejército refuerzan a esta hora la seguridad del municipio.

“Ante situación de orden público en Tuluá, Valle del Cauca, más de 120 hombres de la Tercera Brigada del Ejército refuerzan el dispositivo de seguridad en coordinación con la Policía. La implementación de puestos de control en vías de acceso, refuerzo operacional en puntos críticos y presencia en las vías del casco urbano son algunas de las acciones de la Fuerza Pública para garantizar la seguridad de los tulueños, vallecaucanos y colombianos”.

Carro abandonado con explosivos en la Alcaldía de Tuluá

Vale recordar que el pasado sábado 3 de febrero se confirmó el hallazgo de un carro marca KIA, de placas FWO202, el cual dejaron abandonado muy cerca de la Alcaldía de Tuluá y se encontraba cargado con una gran cantidad de armas y explosivos, lo que generó la alarma en las autoridades de la región.

El vehículo fue abandonado en un parqueadero de la zona donde se encuentra la Alcaldía. El hecho habría sido obra del grupo La Inmaculada.

Ese sábado, la Policía, una vez se enteró de la situación que se estaba presentando en el municipio, tomó la decisión de evacuar el Concejo municipal, ubicado a pocas cuadras del lugar, así como el cierre de vías aledañas para evitar cualquier tipo de emergencia. Según conoció SEMANA, detrás de este hecho estaría alias Pipe.

Alias Pipe, cabecilla de la estructura criminal La Inmaculada, responsable de homicidios y extorsiones. | Foto: Fiscalía

El sujeto conocido como Pipe, hermano de alias Nacho, según le comentó la fuente a SEMANA, estaría buscando un acercamiento con el Gobierno del presidente Gustavo Petro para dialogar, por lo que la información de este vehículo habría sido con el ánimo de mostrar su ”voluntad” al diálogo.

Este medio conoció que el hombre, quien se encuentra recluido en la cárcel La Picota, en Bogotá, estaría esperando iniciar un diálogo con Otty Patiño, actual Alto Comisionado de Paz, con el fin de negociar directamente con altos estamentos del Estado colombiano.

La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, también le pidió al Gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, así como al ministro de Defensa, Iván Velásquez, que los acompañen “decididamente a retomar el control territorial en Tuluá”.

En un mensaje publicado el pasado 3 de febrero a través de las redes sociales, la gobernadora manifestó enfáticamente: “No puede ser que estemos volviendo a vivir en Colombia los crueles tiempos ya superados”. Además, recalcó que “todos los actores del Estado debemos reunirnos para devolverles la tranquilidad a los tulueños y a la región Pacífica”.