La Fiscalía General de la Nación confirmó la desaparición de una concejal del municipio de Argelia, Cauca. La denuncia se da en medio de la ola de violencia que protagonizan las disidencias de las Farc en el territorio.

Sandra Milena Betancourt Buitrón, una reconocida política de 29 años del departamento, habría recibido amenazas por su liderazgo y trabajo social. Misteriosamente, no se volvió a reportar desde el sábado 25 de mayo.

Se conoció que salió de la residencia de su mamá, ubicada en el corregimiento Olaya del municipio de Balboa, sobre las 5:00 p. m. de ese día, en compañía de tres hombres a bordo de un vehículo particular y, desde entonces, se desconoce el paradero.

“Cualquier información comunicarse al celular 3183472016 con el grupo de identificación de personas y búsqueda de desaparecidos del CTI de Popayán, Cauca”, se lee en la comunicación del ente de investigación.

Este incidente ocurre en el marco de la crisis de inseguridad que vive el suroccidente colombiano a causa de la arremetida del autodenominado Estado Mayor Central de las Farc en contra la Fuerza Pública y la población civil.

Los responsables de las alteraciones del orden público son los integrantes del bloque occidental de la guerrilla, quienes acogen a dos estructuras: Jaime Martínez y Dagoberto Ramos, quienes tendrían en su poder a más de 1.600 hombres armados.

Disidencias de las Farc. (Imagen de referencia). | Foto: AFP or licensors

La principal economía de este grupo ilegal es el narcotráfico y el cobro de extorsiones. Solo en un laboratorio de cocaína, podrían estar ganando hasta 21 millones de dólares una vez ponen la producción en venta.

El Cauca es el principal imperio y la orden del presidente Gustavo Petro es arrebatárselo. Eso implica que deben soltar los cultivos de marihuana y los grandes centros de coca que tienen en todos los rincones del departamento.

La poca disposición para transitar a la legalidad llevó al Gobierno nacional a levantar el cese al fuego que contuvo la violencia en esa zona. Hoy hay constantes ataques, enfrentamientos y hostigamientos que suman muertos y heridos.

El episodio más reciente se presentó el pasado lunes, cuando los guerrilleros adelantaron acciones terroristas en tres municipios y atacaron ferozmente a la Policía Nacional, dejando sin vida a dos uniformados y a dos privados de la libertad.

El panorama es alarmante. Así lo reconoce el gobernador: “Necesitamos más pie de fuerza, mayor base tecnológica, requerimos más inversión social para poder contener en los territorios la población. Tenemos que reorientar acciones y cambiar estrategias”.